Manzano ornamental

Los Malus o Manzanos ornamentales son arbustos apreciados por su porte compacto, redondeado y sus dimensiones reducidas, muy prácticos para los pequeños jardines. El follaje verde adquiere un hermoso tono dorado en otoño. En abril, después de 3 años de cultivo, se adornan con numerosas flores blancas, rosas o rojas justo antes de que aparezcan las hojas. Luego vienen los frutos decorativos, anaranjados o rojos. Bien maduros, se pueden cocinar en gelatinas. De crecimiento rápido, los Manzanos ornamentales se plantan en cualquier buen suelo de jardín suelto, rico, fresco, incluso un poco calcáreo añadiendo compost en la plantación. Crecen bajo un sol no ardiente y resguardados de los vientos dominantes que pueden dañar la floración. La poda se limita a eliminar la madera muerta y equilibrar las ramas a finales del invierno. La protección contra enfermedades y parásitos es la misma que para los manzanos frutales. Los Malus se utilizan aislados, en setos libres o en el fondo de un macizo o en maceta para las variedades enanas. En los huertos, favorecen la polinización. Consejo: Tutorar durante los primeros años para que el tronco crezca bien recto y realizar un tratamiento preventivo completo al hincharse los yemas, al brotar, al caer los pétalos florales y cuando los frutos alcanzan 1 cm de diámetro.

Para obtener más información, consulte también nuestro artículo "Manzano ornamental, manzano de adorno: plantación, poda, mantenimiento"