Rosales trepadores rojos
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Los rosales trepadores rojos ofrecen una floración ricamente coloreada, potente, expresiva y estructurante, en muros, pérgolas o carpas de jardín. Estas variedades, trepadoras o no, abarcan toda la gama de los rojos, desde el carmesí aterciopelado hasta el rojo escarlata, pasando por el rojo casi negro.
El rosal ‘Etoile de Hollande’ es apreciado por sus rosas muy dobles, de un rojo aterciopelado profundo, con un perfume intenso. Ofrece una floración remontante sobre un follaje verde oscuro. El rosal antiguo ‘Guinée’ seduce con sus grandes rosas púrpura oscuro, muy fragantes; florece principalmente a principios de verano, con a veces una remontada más discreta. Más vivo, ‘Sympathie’ produce grandes flores semi-dobles rojo bermellón, agrupadas en racimos, en una planta vigorosa, ideal para una pérgola a pleno sol. ‘Florentina’, una variedad reciente, combina un rojo cereza intenso con una floración bien remontante y un porte compacto, adaptado a pequeños espacios. El rosal inglés David Austin ‘Falstaff’, de un rojo carmesí muy profundo, perfumado, también puede guiarse como pequeño trepador sobre un soporte sólido. ‘Excelsa’, no remontante, pero muy florífera a principios de verano, se cubre de pequeñas flores rojo carmín agrupadas en amplios ramos; hace maravillas en una valla o una carpa de jardín.
El rojo es también uno de los pocos colores que conserva toda su intensidad a pleno sol, donde otros tonos palidecen o se desvanecen.
Estos rosales dan lo mejor de sí mismos al sol o a media sombra, en un suelo rico y bien drenado. Guíe sus tallos desde la plantación para fomentar una floración distribuida, y pode ligeramente después de cada oleada de flores para estimular las remontadas, cuando la variedad lo permita.
Para más información, consulte también nuestro dossier "Rosales: cómo plantar con éxito en macetas y con raíces desnudas"
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