Coníferas rastreras
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Nuestra gama de Coníferas rastreras. Entre las coníferas enanas, las variedades con porte rastrero o postrado son perfectas para cubrir el suelo de manera elegante y duradera en las rocallas y sobre los taludes. El Juniperus horizontalis 'Blue Chip' es uno de los más populares con su follaje azul plateado y su porte extendido. El Juniperus procumbens 'Nana' es otro favorito con su follaje verde oscuro que se torna ligeramente bronceado en invierno. Originario de Siberia, el Microbiota decussata se distingue por su extrema robustez así como por su follaje ligero y plumoso que adquiere un tono cobrizo en otoño. El Juniperus communis 'Green Carpet' es apreciado por su follaje verde vivo y su crecimiento rápido. Mencionemos también el Pinus mugo 'Mughus' que forma un gran cubresuelos de 1,20 m, esta conífera es conocida por su resiliencia y su follaje denso y verde oscuro. Uno de los más conocidos es el enebro común 'Repanda', muy resistente, sin exigencias, que forma un tapiz impenetrable volviéndose bronceado en invierno.
Las coníferas rastreras se adaptan a una amplia gama de suelos, pero prefieren un suelo drenado. También se les puede ofrecer una exposición soleada, incluso a media sombra. Una vez bien establecidas, requieren poco mantenimiento y son resistentes a la sequía. Plántelas en otoño o primavera, espaciando suficientemente los plantones para permitirles extenderse. Riegue regularmente el primer año para favorecer un buen enraizamiento, luego solo en periodos de sequía prolongada.
Estas coníferas rastreras son particularmente apreciadas por su capacidad para prevenir la erosión de los suelos y su bajo requerimiento de mantenimiento. Sin embargo, vigile las enfermedades y las infestaciones de plagas, especialmente en suelos demasiado húmedos.
Para más información, consulte también nuestro dossier "Principales enfermedades y plagas de las coníferas"
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