Primula polyantha Tie Dye

La Prímula polyantha 'Tie Dye' es una prímula original y de gran frescura. Sus flores de buen tamaño son blancas, fuertemente estriadas de azul-violáceo, centradas en una hermosa garganta amarilla brillante. Florecen durante casi 6 meses, insensibles a las inclemencias del tiempo, en una pequeña roseta de hojas verde oscuro. Esta variedad reciente es sublime cuando se combina en una gran maceta con escilas de Siberia, muscaris y la prímula Belarina Blue. Se cultiva sin dificultad en un suelo fresco, al sol o a media sombra.

La Prímula 'Tie Dye' es una planta vivaz herbácea de la familia de las primuláceas, procedente entre otras de la Primula vulgaris que se encuentra en nuestras praderas y bosques y de la P. veris, conocida como Coucou. Esta sorprendente variedad se distingue por su larga floración, abundante y continua, de enero a mayo-junio. Es una planta florífera que forma en pocos meses un bonito manojo de hojas, de 15 a 25 cm de altura y de 25 a 35 cm de ancho. Desarrollan rosetas más o menos persistentes de hojas abullonadas y nervadas, de un hermoso verde claro y franco. 'Tie Dye' produce grandes flores de 3,5 cm, bien abiertas, ligeramente onduladas, aleatoriamente rayadas de azul-violáceo, iluminadas por una gran garganta amarilla. Están agrupadas en racimos y llevadas por pedúnculos cortos peludos rodeados de un collar de follaje exuberante. Esta variedad aprecia las exposiciones semi-sombreadas.

Nuevas creaciones varietarias vuelven a poner en escena estas vivaces a menudo cultivadas como bienales, ¡para nuestro mayor placer! La prímula híbrida Tie Dye es una planta versátil fiable y realmente fácil de cultivar. Merece estar en todos los jardines y en todos los balcones. Original y florífera, no deja de ser elegante y fácil de combinar con bulbos de primavera, acompañando con su tono azul el amarillo de los narcisos y de la campanilla de invierno, por ejemplo. En bordillos de jardín o en macetas en un balcón, esta planta se combina bien con sus compañeras de color blanco, azul, rosa, con los nomeolvides o las saxífragas. Las prímulas son perfectas bajo la sombra de frondosas, en rocallas y céspedes, entre las campanillas de invierno y las violetas. Las hojas y las flores son comestibles y se pueden consumir crudas o cocidas.