Follajes púrpuras: anuales que electrizan el jardín

¿Por qué adoptar follajes púrpuras?

Las plantas con follaje púrpura aportan un pequeño no-sé-qué que marca la diferencia en el jardín. A diferencia de los follajes verdes clásicos, su color intenso atrae inmediatamente la mirada. En un macizo, una jardinera o una simple maceta en la terraza, crean contraste y realzan las plantas vecinas.

El púrpura tiene la ventaja de ser a la vez elegante y un poco misterioso. Añade profundidad a las asociaciones vegetales, lo que da la impresión de un jardín más rico y estructurado. Además, estos follajes siguen siendo decorativos durante toda la temporada, incluso cuando la floración es más discreta.

Otro punto fuerte: su gran adaptabilidad. El follaje púrpura funciona igual de bien en un jardín contemporáneo muy gráfico que en un espacio más natural o romántico. Basta con elegir bien las plantas con las que se asocian. Y si se quiere jugar la carta del contraste, nada mejor que combinarlos con follajes dorados, plateados o flores de tonos vivos.

Por último, adoptar plantas con follaje púrpura es también salirse un poco de lo convencional. Es atreverse con colores menos clásicos, dar carácter a las composiciones y expresar creatividad.

Dos matices de púrpura entre otros: Cóleo ‘Palisandra’ y Cóleo ‘Mezmerize Rusty Red’

Las más bellas anuales de follaje púrpura

Ipomea: Ipomoea batatas ‘Sweetheart Jet Black’

Esta variedad de ipomea ornamental presenta un follaje en forma de corazón, de un púrpura tan intenso que parece casi negro. Las hojas miden hasta 15 cm de largo. La planta adopta un porte compacto y colgante, alcanzando una altura de 20 a 40 cm y extendiéndose entre 40 y 60 cm. Es ideal como planta cubresuelos o en suspensión, y aporta un toque dramático en asociación con otras plantas.

Amaranto: Amaranthus cruentus ‘Velvet Curtains’

El amaranto ‘Velvet Curtains’ es una anual vigorosa que destaca por sus plumeros erectos de un carmesí oscuro y su follaje ovalado de un púrpura intenso con reflejos grises. Adopta un crecimiento vertical y arbustivo, alcanzando una altura de 1,2 m y un ancho de 60 cm. Sus inflorescencias plumosas y su follaje llamativo añaden un toque exótico a los macizos y también son apreciadas como flores cortadas.

Los Cóleos con follaje púrpura

Los cóleos son viváceas sensibles al frío con follajes muy coloridos, ideales para media sombra en bordillos y macizos, que también pueden cultivarse varios años en interior. También se les conoce como Plectranthus o Solenostemon scutellaroides. Algunos ofrecen follajes púrpuras con formas y matices variados, siempre muy dramáticos. Entre las variedades destacadas:

• ‘Mezmerize Rusty Red’ presenta hojas de textura rica, en tonos púrpura óxido intenso con bordes ligeramente dentados.
• ‘Palisandra’ se distingue por un follaje aterciopelado de un violeta profundo, casi negro, con forma ovalada y bordes dentados.
• ‘Copinto Manhattan‘ ofrece hojas de un color ambiguo, en púrpura-chocolate violáceo oscuro, con bordes crenulados.

Estos cóleos alcanzan generalmente una altura de 30 a 60 cm y un ancho similar, según las condiciones de cultivo.

Albahaca púrpura: Ocimum basilicum ‘Purple Ruffles’

Esta albahaca morada combina utilidad culinaria y atractivo ornamental con su follaje púrpura oscuro. Las hojas ovaladas miden unos 5 cm de largo y están muy recortadas. La planta forma un arbusto compacto de 30 a 45 cm de altura y 15 a 20 cm de ancho. Además de añadir un toque de color al jardín, sus hojas aromáticas enriquecen los platos con su sabor distintivo y su bonito color, ideales en ensaladas, platos asiáticos o sopas.

Ricino común: Ricinus communis ‘Honolulu’

El ricino ‘Honolulu’ es una planta imponente con un follaje profundamente lobulado de un rojo púrpura brillante. Las hojas palmeadas pueden medir hasta 30 cm de diámetro. La planta en sí puede alcanzar 1,5 a 2 metros de altura, con una envergadura de 1 a 1,5 metros, creando un punto focal impactante en el jardín.

Sericura: Pennisetum x advena ‘Rubrum’

Esta gramínea ornamental es apreciada por sus hojas arqueadas de un púrpura rojizo y sus inflorescencias plumosas rosa púrpura. Forma una mata grácil que alcanza 90 a 120 cm de altura y unos 60 a 90 cm de ancho. Perfecta para añadir movimiento y textura a los macizos, aunque es sensible a las heladas.

Alternanthera ‘Purple Knight’

La Alternanthera ‘Purple Knight’ es una anual vigorosa poco conocida con follaje púrpura oscuro casi negro. Las hojas ovaladas miden unos 5 a 7 cm de largo. La planta forma un cubresuelos denso, alcanzando 30 a 45 cm de altura y extendiéndose 60 a 90 cm, ideal para bordillos o composiciones en macetas.

En el sentido de las agujas del reloj: Pennisetum ‘Rubrum’, Alternanthera ‘Purple Knight’, Ricino ‘Honolulu’, Ipomea ‘Jet Black’, Albahaca púrpura ‘Purple Ruffles’, Amaranto ‘Velvet Curtains’

Consejos de cultivo y mantenimiento

Las plantas anuales (¡de follaje púrpura!) no solo son hermosas: generalmente también son fáciles de cuidar. Pero para que revelen todo su potencial, algunos pequeños cuidados marcan la diferencia. Aquí tienes todo lo que necesitas saber para mantenerlas en plena forma y bien coloridas durante todo el verano.

La exposición ideal
La mayoría de estas plantas prefieren el sol o la media sombra. El pleno sol suele intensificar el tono púrpura del follaje, pero cuidado con los golpes de calor en algunas, como los Cóleos, que prefieren una luz más suave y filtrada por la tarde.

Un suelo bien drenado, siempre
Ya sea en terreno abierto o en macetas, un suelo drenante es esencial. A las raíces no les gusta el exceso de agua estancada. Un buen sustrato de calidad, enriquecido con compost o materia orgánica, les da un buen comienzo. Para las macetas, no olvides la capa de drenaje en el fondo (bolas de arcilla o grava).

Riego regular pero sin excesos
Un riego regular es importante, especialmente para los planteros y planteles o en caso de mucho calor. Pero atención: deja que el sustrato se seque ligeramente entre riegos. Demasiada agua puede provocar hojas opacas o incluso enfermedades. Las gramíneas como el Pennisetum son bastante tolerantes a la sequía una vez bien establecidas.

¿Invernada? No es necesaria
Estas bellezas son anuales: no sobreviven al invierno. Pero algunas, como los Cóleos, pueden esquejarse al final de la temporada y guardarse en el interior para retomarse en la siguiente primavera. Y si tus Cóleos están en macetas, simplemente puedes seguir cultivándolos en el interior.

Ideas de asociaciones en el jardín

El follaje púrpura es un recurso visual poderoso, pero es al combinarlo con otras texturas, formas y colores cuando realmente revela todo su potencial. Aquí tienes algunas ideas para crear composiciones llenas de energía y armonía, tanto en un balcón, una terraza como en un gran jardín.

Con follajes dorados o plateados: el contraste elegante
Combinar el púrpura con follajes amarillo dorado (Cóleo ‘Copito Caipirinha’) o gris plateado (Helichrysum petiolare o Artemisa blanca) crea un efecto de contraste muy luminoso. Es una combinación que atrae inmediatamente la mirada, perfecta para macetas en la terraza o en la entrada. El follaje oscuro resalta los tonos claros, y viceversa.

Con flores de colores cálidos: el efecto flamígero
Rojo, naranja, amarillo… los tonos cálidos combinan maravillosamente bien con el púrpura. Imagina un Ricino ‘Honolulu’ rodeado de zinnias naranjas o de rudbeckias amarillas: ¡ambiente de atardecer garantizado! Estas asociaciones crean un jardín lleno de energía, casi tropical.

Con flores blancas o pastel: para la elegancia
El púrpura intenso de los follajes resalta la suavidad de las flores blancas, crema o rosa pálido. Al combinarlas con impatiens blancas, petunias rosas o verbenas claras, se obtiene un ambiente delicado, romántico, muy relajante.

En maceta o suspensión: relieve y color
Los follajes púrpuras son ideales para estructurar las macetas. En segundo plano para las variedades altas o colgantes para las variedades rastreras. También puedes crear macetas monocromáticas con diferentes matices de púrpura para un efecto muy moderno.

Una idea de combinación: Cóleo púrpura, Helichrysum petiolare en gris y Cóleo dorado ‘Caipirinha’