Gypsophila repens Alba - Aliento de bebé

El Gypsophila repens 'Alba' es una planta perenne tapizante con un follaje perenne verde medio azulado. En verano, se cubre de una nube de pequeñas flores blancas estrelladas que le dan un aspecto muy vaporoso. Es una vivácea bien adaptada a la sequía, ideal para rocalla, en los intersticios de muros, taludes secos o en macetas.

El Gypsophile pertenece a la familia de las Caryophyllaceae. El tamaño adulto de esta variedad no superará los 25 cm de altura, formando un cojín extendido que se expandirá año tras año. La floración ocurre de mayo a agosto si el suelo permanece un poco fresco, presentando numerosas y pequeñas flores de cinco pétalos blancos. Las flores se organizan en cimas, creando un efecto de niebla estético y extremadamente ligero. El follaje, persistente a semiperenne, verde medio azulado, está compuesto por hojas pequeñas opuestas y glabras de 1 a 3 cm, sostenidas por tallos rastreros.

Esta vivácea es perfecta para suelo seco y rocoso, no teme al calcio y se adapta fácilmente a los intersticios de muros y pavimentos. También puedes integrarla en la composición de tus macetas de flores y jardineras, combinándola con sedums, por ejemplo. Otra opción es ubicarla junto a salvias, rosas antiguas o gauras en macizos. El aspecto etéreo de sus pequeñas flores resalta especialmente las viváceas de flores grandes. En taludes soleados, cumplirá perfectamente su función como planta cubresuelos.