Miscanthus sinensis Emmanuel Lepage

La Eulalia sinensis 'Emmanuel Lepage' es una eulalia que se distingue de todas las demás variedades por su follaje semi-perenne, flexible, formando una mata muy densa, con un porte ligeramente abierto, ornamental durante gran parte del año. Su elegancia también radica en su floración, que se eleva por encima de su vegetación, en forma de hermosas espigas plumosas de color beige rosáceo que generalmente florecen en el mes de agosto y persisten durante mucho tiempo en la planta. Una gran gramínea muy resistente, ideal para regiones frías, en el fondo de grandes macizos o aislada.

La Eulalia 'Emmanuel Lepage' pertenece a la familia de las Poáceas. Es una selección hortícola francesa, obtenida en 1995 por los viveros Lepage. Esta planta proviene de Miscanthus sinensis, originario del extremo oriente de Asia y Oceanía. Se trata de una gramínea con rizomas cortos que se desarrolla en mata no rastrera, calificada como cespitosa. El porte, a la vez erguido y colgante, alcanza 1,50 m a 1,60 m de altura, en flor, 1 m para el follaje, con una extensión de unos 90 cm. Las hojas, muy largas, flexibles y rugosas, presentan un color verde intenso. En regiones con inviernos suaves, permanecen verdes de enero a diciembre. Largos tallos con flores emergen del follaje de agosto a octubre, en forma de grandes espigas digitadas y sedosas de 30 a 40 cm de largo, de un beige plateado apenas teñido de rosa. Al marchitarse, adquieren un tono crema muy suave.

Esta Eulalia permite estructurar un macizo de forma permanente. Está diseñada para el fondo de grandes macizos a los que su fuerte presencia aporta mucha clase. Será ideal para jardineros contemplativos con un espíritu de jardín silvestre; colócala detrás de grandes ásteres o Helianthus. En jardines modernos, con líneas depuradas, acompaña a los bambúes, los Nandina o los helechos si el suelo es fresco. Las eulalias se prestan bien a una plantación en un seto, formando una pantalla en bordes de entrada, para aislar una parte del jardín, o simplemente ocultar la vista hacia la calle o el jardín de un vecino. En un jardín urbano, la Eulalia 'Emmanuel Lepage' suavizará las estructuras de hormigón. En el borde de las charcas, su silueta es a la vez exótica, misteriosa y natural.