Las enfermedades y parásitos de los tulipanes

Las enfermedades y parásitos de los tulipanes

Identificación, prevención y soluciones naturales

Contenido

Modificado el martes, 3 de junio de 2025  por Marion 6 min.

Las tulipanes forman parte de esos bulbos de primavera imprescindibles para aportar una hermosa diversidad de colores y un toque de elegancia, ya sea en el jardín o en macetas. Fáciles de cultivar y poco exigentes, se cultivan al sol en suelo bien drenado, que no retenga el agua en exceso. Incluso pueden naturalizarse y volver fielmente cada año sin intervención del jardinero.

Sin embargo, los tulipanes pueden ser víctimas de parásitos o enfermedades que afectarán su floración. Veamos cuáles son los más comunes, cómo prevenir los riesgos y aplicar tratamientos naturales en caso necesario.

Y para saber más sobre el cultivo de los tulipanes, descubre nuestro dossier Tulipanes: plantar, cultivar y cuidar.

Dificultad

Los roedores que atacan a los bulbos de tulipanes

Identificación

Estos son los enemigos número uno de las plantas de bulbo, incluidos los tulipanes. Si notas que tus tulipanes no logran salir de la tierra, es posible que hayan sido víctimas del apetito de estas pequeñas plagas. Los topillos, topillos campesinos y ratones disfrutan especialmente de los bulbos de flores. Si vives en el campo, cerca de un bosque, los jabalíes también pueden deleitarse con los bulbos de tulipanes.

Cabe destacar que los topos también pueden causar algunos daños en un parterre de tulipanes al cavar galerías, lo que puede ocasionar la destrucción del sistema radicular de los bulbos. Sin embargo, no se alimentan de ellos, ya que son insectívoros.

Prevención y soluciones

Como prevención, la idea es hacer que los bulbos de tulipanes sean inaccesibles para las plagas. Para ello, puedes cultivarlos primero en macetas. En terreno abierto, rodea tus tulipanes con una malla de malla fina. Puedes confeccionar una protección individual o rodear varias plantas juntas. También existen en el mercado cestas antiroedores o jaulas para bulbos, que protegen las plantas del apetito de los pequeños animales.

plantar bulbos con cestas anti topillos

Algunas plantas tendrían la capacidad de repeler naturalmente a los roedores, debido al fuerte olor que desprenden. Este es el caso de:

Colócalas, por tanto, en medio de tus macizos de tulipanes.

También puedes plantar alrededor de tus tulipanes bulbos conocidos por ser poco apreciados por los roedores, como los narcisos, las amarilis o las campanillas de invierno, tóxicos para los pequeños mamíferos plagas.

Por último, algunos jardineros recurren a pulverizaciones de purines de plantas (ajo o saúco, por ejemplo), cuyo olor ayudaría a ahuyentar a los roedores.

Para más información: ¿Cómo proteger los bulbos de los roedores?

El fuego del tulipán

Identificación

Se trata de una enfermedad criptogámica (Botrytis tulipae), causada por un hongo. El fuego del tulipán se ve favorecido por los excesos de humedad. Se reconoce por las manchas grises o parduzcas que aparecen en el follaje, en los tallos y en las flores, lo que afectará a la producción de tulipanes. El follaje incluso puede deformarse.

síntomas y tratamiento del fuego del tulipán

Prevención y soluciones

Para prevenir la mayoría de las enfermedades criptogámicas, se pueden tomar algunas medidas.

  1. No plantes tulipanes en una zona previamente afectada por enfermedades criptogámicas. Las esporas pueden sobrevivir varios años en el suelo.
  2. Cuida las condiciones de cultivo. Proporciona a tus tulipanes un suelo bien drenado, que permita que el agua se evacúe fácilmente. En suelo pesado, añade grava o bolas de arcilla al momento de la plantación, para aligerar el sustrato. También procura instalar tus tulipanes en exposición soleada.
  3. Deja un mínimo de espacio entre tus bulbos (unos 15 cm), para favorecer la aireación natural.
  4. Al regar, evita mojar o salpicar el follaje.
  5. Coloca un acolchado orgánico al pie de tus tulipanes, para conservar mejor la humedad del suelo y limitar la evaporación.
  6. Algunos jardineros recurren a los purines de plantas, tanto preventivos como curativos, contra las enfermedades criptogámicas. Es el caso de los purines de ortiga o de cola de caballo, conocidos por estimular el sistema inmunológico de las plantas y por tener acción antifúngica. Puedes encontrarlos en comercios o prepararlos tú mismo fácilmente. Para ello, sigue nuestros tutoriales para hacer purín de ortiga o purín de cola de caballo.

Si tus bulbos están afectados por el fuego del tulipán, no hay otra solución que arrancar las plantas enfermas, para limitar el contagio. Ningún tratamiento curativo parece ser eficaz.

Como complemento, descubre nuestro artículo Todo sobre las enfermedades criptogámicas.

Las babosas y caracoles: causan daños en los tulipanes

Identificación

Los gasterópodos son una de las plagas más conocidas por los jardineros. Su apetito puede llevarlos a deleitarse con las hojas jóvenes e incluso con las flores de los tulipanes. Sobre todo pueden causar daños en los planteles y planteros, de los que pueden disfrutar por completo.

gasterópodos y tulipanes

Prevención y soluciones

Existen muchas soluciones para combatir babosas y caracoles. Su eficacia depende de las experiencias y los jardines.

  1. Las trampas de cerveza
  2. Las barreras naturales. Pueden estar hechas de cenizas, tierra de diatomeas, cáscaras de huevo o incluso posos de café. Solo son efectivas con tiempo seco y deben renovarse regularmente.
  3. El cultivo de plantas repelentes, como la artemisa o la tanaceto.
  4. La recolección manual temprano por la mañana o al anochecer. Es una solución que requiere tiempo, pero es eficaz. También te permite elegir qué hacer con estos glotones babosos (eliminarlos o trasladarlos a una zona alejada del jardín).
  5. La aplicación de gránulos anti babosas. A diferencia de los productos antiguos que eran muy tóxicos, los gránulos a base de ferramol son aptos para la agricultura ecológica y no representan riesgos para las mascotas o los depredadores naturales de los gasterópodos. Actúan como inhibidores del apetito, lo que hace que las babosas y los caracoles dejen de alimentarse y, por tanto, mueran.

En paralelo, favorece la presencia de depredadores naturales, como sapos, aves, erizos, etc. Para ello, evita el uso de productos químicos en tu jardín, instala nidos, refugios, bebederos y comederos, deja zonas en barbecho, etc.

La suelta de gallinas o patos tipo «corredor indio» también puede ayudar a regular la presencia de babosas y caracoles. Sin embargo, ten cuidado: estas aves pueden dañar los cultivos al escarbar el suelo con sus patas.

Como complemento, descubre nuestro artículo Babosas: 7 formas de combatirlas de manera eficaz y natural.

Los pulgones en los tulipanes

Identificación

Estos son otras plagas muy frecuentes en los jardines. Los pulgones son insectos chupadores que se alimentan de la savia de las plantas, lo que contribuye a debilitarlas. Sobre todo, la melaza pegajosa que segregan puede favorecer la aparición de una enfermedad criptogámica: la fumagina. Se reconoce por los depósitos negros que recuerdan al hollín y que se forman en las hojas, tallos o flores. Al impedir la correcta fotosíntesis, puede provocar el marchitamiento de los bulbos. Los pulgones también pueden transmitir otros agentes patógenos a los tulipanes, lo que afectará su buen desarrollo.

pulgones y tulipanes

Prevención y soluciones

Una observación regular de tus tulipanes te permitirá detectar rápidamente los primeros signos de la presencia de pulgones: pequeñas colonias de puntos negros, hojas enrolladas, circulación de hormigas que protegen a estas plagas a cambio de su melaza, etc.

Si los pulgones son pocos, puedes eliminarlos manualmente. En caso de infestación, utiliza jabón negro para fabricar un insecticida natural. Diluye una cucharada sopera en 1 litro de agua tibia. Agita y luego rocía sobre las partes afectadas al final del día. Repite si es necesario después de unos diez días. Precaución: aunque es natural, este insecticida no es selectivo y también puede afectar a otros insectos.

Al igual que en la lucha contra los gasterópodos, piensa también en favorecer la presencia de depredadores naturales de los pulgones, diversificando tus cultivos: mariquitas, crisopas, etc.

Por último, algunas plantas, como la capuchina, sirven naturalmente de imanes para pulgones, desviando a estas pequeñas plagas de otros cultivos. Sin embargo, solo será eficaz con tulipanes tardíos, el tiempo necesario para que pueda desarrollarse lo suficiente como para atraerlos.

Como complemento, descubre nuestro artículo Pulgón: identificación y tratamiento.

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tulipán enfermo