Cytisus decumbens - Ginesta

El Cytisus decumbens, o Ginesta, es un arbusto tapizante, caduco, de porte postrado y tapizante. Sus hojas pequeñas simples y sedosas son de un verde tierno que contrasta bellamente con la floración amarillo brillante que ocurre en mayo-junio. Este subarbusto es muy resistente, tolerante a la sequía y poco exigente con la naturaleza de su suelo. Encontrará fácilmente su lugar en un jardín cálido y seco para formar un tapiz florido extremadamente luminoso.

La Ginesta es un subarbusto originario del sur de Europa. Está presente en el centro y noreste de Francia, donde crece en praderas y laderas de colinas. Esta retama muestra un porte postrado y no supera los 20 a 30 cm de altura con una envergadura de aproximadamente 1 m. Es la Ginesta más rastrera de su especie y por lo tanto forma un cubresuelos muy eficaz, capaz de vegetalizar espacios inhóspitos del jardín. Sus ramas son verdes, ascendentes, pentagonales, delgadas y ramificadas. Presentan un aspecto aterciopelado en estado juvenil y desarrollan raíces. Las ramas portan un follaje caduco hasta su extremo. Las hojas, de color verde tierno, sedosas, oblongas y simples, son cortamente pecioladas y miden entre 0,5 y 2 cm. Su revés está cubierto de pelos finos. En mayo y junio, el Cytisus decumbens ofrece una profusión de flores de un amarillo muy luminoso. Las flores de esta Ginesta son relativamente grandes, dispuestas en largos racimos a lo largo de las ramas, miden entre 1 y 2 cm. La floración es tan abundante que eclipsa casi por completo el follaje. Una fructificación, sin interés ornamental, sigue luego en forma de vainas negras de 2 a 3 cm de largo. Se recomienda eliminar los frutos para no debilitar la planta.

El Cytisus decumbens aprecia las exposiciones soleadas o muy ligeramente sombreadas, suelos pobres y bien drenados, neutros o ligeramente ácidos. Tolera igualmente terrenos ligeramente calcáreos. Elige bien su ubicación porque soporta mal los trasplantes. La Ginesta presenta una excelente rusticidad que le permite soportar temperaturas inferiores a -15°. Planta tu Cytisus decumbens en un suelo arenoso, sin añadir fertilizantes. Si tu tierra es pesada, no dudes en aligerarla con turba, arena o grava. Riégalo regularmente en la temporada cálida los dos primeros años de plantación. Una vez establecido, la Ginesta ofrece una buena tolerancia a la sequía. Este arbusto presenta una resistencia satisfactoria a enfermedades, aunque puede sufrir ataques puntuales de ácaros. Cabe señalar que la vida útil de las Ginetas rara vez supera los 5 años. Sin embargo, son fáciles de mantener y poco exigentes, ¡lo que les vale un lugar en la mayoría de los jardines!

La Ginesta se utiliza en un macizo, en una rocalla o incluso en una gran maceta que vestirá gracias a su porte colgante. Combina con otros arbustos cubresuelos de terrenos secos como una Coronilla, un Dianthus deltoides o una Lavanda mariposa para una diversidad de flores muy coloridas.