Philadelphus lemoinei Innocence - Celinda

El Philadelphus Innocence es una variedad de celinda muy antigua, que quizás merezca más que ninguna otra, debido a su aroma inolvidable, el nombre de Jazmín de los poetas que a veces se da a estos arbustos. 'Innocence' encanta en primavera, por una abundancia de racimos de flores blancas y fragantes, tan simples y ligeras, pero también seduce fuera de la floración, por su follaje salpicado al azar de crema, amarillo y dorado. Un poco lento en fijarse, esta celinda forma con el tiempo un arbusto bien denso, muy sólido, de porte fluido y ligeramente arqueado. Su follaje variegado, que teme el mordisco del sol, viste con mucha elegancia las zonas sombreadas o de media sombra del jardín.

El Philadelphus Innocence es uno de los numerosos híbridos hortícolas resultantes del cruce entre Philadelphus microphyllus (originario del sureste de EE.UU.) y P. coronarius (originario del sur de Europa y Asia Menor), obtenido en 1900 en Francia por Victor Lemoine. Todas estas plantas pertenecen a la familia de las hydrangeáceas, al igual que las hortensias. Este arbusto es en realidad un conjunto de tallos sólidos, flexibles y curvados, que emergen directamente del suelo, dando a la planta un porte denso, compacto y ligeramente abierto. Su establecimiento es lento: la celinda requiere varios años para estar en su mejor momento. En madurez, este arbusto alcanzará unos 2.50m de altura, y casi lo mismo en anchura. La floración, particularmente generosa, ocurre a finales de primavera o principios de verano, más o menos temprano según el clima. Las flores, blancas, compuestas de 4 pétalos dispuestos en copas planas, miden unos 3-4 cm de diámetro. Se agrupan en racimos terminales algo sueltos. Su aroma, intenso, revela notas de flor de azahar con toques de bledo. Muy decorativo, su follaje caduco está compuesto por hojas ovaladas, enteras, con borde finamente dentado, de unos 10 cm de largo, ligeramente pubescentes en el revés. Casi crema al inicio de la primavera, se vuelven variegadas y se puntean luego de amarillo más o menos intenso, y se tornan verdes a principios de otoño. La corteza de este arbusto, de un color marrón-rojizo a anaranjado, se descama con la edad. Las celindas viven muchos años en el jardín.

El Jazmín de los poetas es una planta perfectamente resistente e indiferente a la naturaleza del suelo, incluso si es calcáreo y seco en verano, una vez que está bien establecido. Este arbusto, a veces considerado poco elegante en invierno, es indispensable en el jardín. Está aureolado de una simbología tal que los hibridadores se han inspirado en él para crear híbridos que resultan ser excelentes plantas de jardín, sólidas, libres de enfermedades y de gran valor ornamental. El follaje variegado de la celinda 'Innocence' le impide una exposición al sol abrasador, prefiere la media sombra, donde revelará toda su esplendor. Plántalo preferiblemente en la segunda o tercera línea de un seto libre, rodeado de evónimos caducos o persistentes, lilas, buddleias, abelias, o grandes rosales arbustivos, ya que tiene obviamente su lugar en el jardín de los aromas. Entre las viváceas, puedes elegir follajes y flores claras como los de Geranium phaeum Album, junto a azucenas blancas, Hosta undulata var albomarginata por ejemplo. Arbustos de flores blancas como la Hortensia Annabelle, la Hortensia quercifolia Snowflake y los amelanchiers lo acompañarán en un jardín blanco, o al borde del bosque. Finalmente, también puedes hacer trepar por sus ramas una clemátide de flores pequeñas tardías (Clematis flammula).