Styrax japonicus Pink Chimes

El Styrax japonica 'Pink Chimes' es un pequeño árbol refinado para los amantes de plantas originales. Aún poco extendida, esta variedad reciente de Styrax del Japón se distingue por sus pequeñas flores en forma de campanillas de color rosa pálido. Bien perfumadas, cuelgan delicadamente en racimos pequeños, dando un carpe impregnado de romanticismo a este arbusto. Y para terminar la temporada con broche de oro, adopta un atuendo otoñal amarillo o anaranjado de bello efecto.

Originario de Japón, Corea y China, el Styrax del Japón es un arbusto caduco de la familia de las Styracaceae, compuesta por árboles y arbustos con resina aromática. Bastante discreta, esta familia vegetal está poco representada en nuestras regiones, a excepción del Halesia carolina, los demás géneros solo se encuentran entre coleccionistas o en jardines botánicos. Entre los Styrax utilizados en ornamentación, también se encuentra el S. obassia, que forma un árbol de tamaño medio, y en el Var, se puede encontrar el Aliboufier (S. officinalis), que curiosamente para un Styrax, tolera el calcio. El Styrax japonica, por su parte, es un gran arbusto ornamental de media sombra y suelo fresco, húmico y no calcáreo. Estos últimos años han visto el nacimiento de cultivares de desarrollo reducido y follajes más coloridos.

El Styrax 'Pink Chimes' se distingue por el color de su floración. Esta no es blanca, sino rosa pálido, lo que renueva el género. Se trata de un gran arbusto o pequeño árbol, que, después de 10 años, alcanzará 2,50 m de alto por 1,80 m de ancho. A largo plazo, culminará a 6 m de altura por 3 m de envergadura. Estas dimensiones razonables permiten su plantación incluso en pequeños macizos, o aislado sobre el césped de un jardín de dimensiones reducidas, más aún porque su crecimiento es lento.
Tiene un porte erguido, más o menos abierto y redondeado en la parte superior, con una bonita densidad de ramas. En junio-julio, se cubre de racimos terminales de pequeñas flores en forma de campanillas colgantes, de color rosa pálido, con la base rosa más oscura. Un ramillete de estambres amarillos adorna el centro de estas encantadoras flores. El follaje es verde intenso, compuesto por hojas estrechas y alargadas. En otoño, este follaje adquiere bonitos tonos en gamas amarillo anaranjado.
Este árbol en miniatura es muy resistente (-20 °C) y puede plantarse al sol, aunque apreciará la media sombra en regiones cálidas. Sobre todo, detesta la sequía y el calcio.

Este Styrax Pink Chimes se sentirá a gusto en general en las mismas condiciones que la Hortensia macrophylla con la que convivirá perfectamente en un macizo, aportando un toque de originalidad. Pertenece a ese grupo de vegetales que, sin ser propiamente plantas de tierra de brezo, aprecian las condiciones de frescor atmosférico y suelos no calcáreos, húmicos y que conservan humedad en verano. En un gran espacio, podrás plantarlo en el borde de un Nyssa sylvatica, gran árbol tan desconocido como él y sin embargo de gran valor ornamental con su coloración otoñal de fuego. En espacios más reducidos, el Oxydendron arboreum también será un buen compañero, con sus pequeñas campanillas blancas en largos racimos en verano y sus magníficos tonos otoñales. Para mantener un registro de plantas poco comunes, también puedes asociarlo a un Sarcococca, arbusto de pequeño tamaño con floración invernal perfumada, y en segundo plano, ¿por qué no disfrutar de la magia de los Avellanos mágicos, con sus floraciones invernales arácnidas y su explosión de colores otoñales?