Digitalis purpurea Suttons Apricot

La Dedalera o Digitalis purpurea Suttons Apricot, una hermosa selección del semillero inglés Suttons, derivada de la Dedalera de nuestros bosques. Esta planta altiva lleva con elegancia su otro nombre de dados de las hadas. Un apodo encantador para estas largas campanillas de un suave y luminoso rosa-albaricoque, agrupadas en grandes bohordos floridos que emergen de zonas con media sombra. Esta gran bienal resistente, o vivácea si se podan las flores antes de la formación de semillas. Es urgente redescubrir estas plantas tan fáciles de cultivar en suelo fresco, que no deberían faltar en ningún jardín de estilo inglés o romántico.

La Dedalera Suttons Apricot es un cultivar reciente de la Digitalis purpurea, una planta de la familia Scrophulariaceae común en Francia. En la naturaleza, aprecia los climas oceánicos de nuestro país, los suelos húmicos y frescos que encuentra en los bordes de los bosques, en el límite entre la sombra y la luz. Es una planta herbácea bienal a vivácea, que desarrolla a partir de la primavera una amplia roseta de 45 cm de diámetro, provista de hojas pubescentes, verde oscuro, crenadas-dentadas, con la cara inferior arrugada en red. A veces están cubiertas de pelos algo lanosos, muy claros. El segundo año, en mayo-junio, emergen de la roseta tallos huecos pero robustos para sostener a más de 1 m de altura un bohordo floral muy denso, compuesto por multitud de flores tubulares apretadas unas contra otras, que se abren de abajo hacia arriba. Cada flor en forma de campanilla acoge un ballet de abejas y abejorros, que acuden incansablemente a abastecerse de néctar y polen. Su color es raro y particularmente seductor: un rosa lavado de albaricoque, muy suave, más o menos moteado y punteado de púrpura. Las dedaleras te sorprenderán al sembrarse de manera natural donde ellas quieran, aunque no siempre fieles a la planta madre.

Instala la dedalera Suttons Apricot al sol tenue o a media sombra, en suelo húmico y fresco, acompañada de rosales antiguos o de viváceas con flores simples como las aquilegias, las centaureas, las astrantias o los thalictros. Esta variedad robusta, de porte elevado, te permitirá disfrutar durante mucho tiempo de su floración en una gran maceta en la terraza. Magnífica, tan salvaje como romántica, esta dedalera también acompañará en bosques claros a geranios vivaces, heucheras, el follaje plumoso de los helechos. Aprovecha también esta maravilla en casa, confeccionando espléndidos ramos.