Digitalis purpurea Monstrosa

La Digitalis purpurea 'Monstrosa' es una forma completamente extraordinaria de Dedalera, que posee lo que se llama una mutación de flor terminal. Esta planta bianual extraña produce en efecto, en el extremo de su bohordo floral, una sola flor enorme, ampliamente abierta y rizada, moteada de púrpura sobre fondo blanco, o a veces completamente blanca. Su floración, espectacular en un jarrón, es un evento en los macizos de verano con media sombra donde se siente especialmente a gusto y se resiembra con mucha frecuencia.

La Dedalera 'Monstrosa' existe por razones que no están claramente dilucidadas en la naturaleza, donde ha sido observada por los botánicos desde mediados del siglo XIX. Su característica única crea, si no un monstruo, una planta extremadamente interesante también para los biólogos. Se trata de una forma particular de Digitalis purpurea, a menudo considerada como una subespecie y nombrada Digitalis purpurea subsp Campanulata. Es una planta de la familia de las Escrofulariáceas, que aprecia los climas oceánicos de nuestro país. Es una planta bianual a vivácea de corta vida, que desarrolla a partir de la primavera una roseta de tamaño modesto, de 30 cm de diámetro, provista de hojas pubescentes, verde oscuro, creneladas-dentadas, cuya cara inferior está arrugada en red. A veces están cubiertas de pelos un poco lanosos, muy claros. El segundo año, en mayo-junio, una o varias tallos huecos pero sólidos emergen de la roseta para llevar a 1.20 m de altura, según las condiciones de cultivo, un bohordo floral delgado pero denso, compuesto de una multitud de flores tubulares apretadas unas contra otras. En la cima se alza una flor dos veces más grande que las demás, más erguida hacia el cielo, ampliamente abierta en forma de copa, con borde dentado. Según las plantas, el exterior de las flores es más o menos púrpura o rosado, a veces blanco. Las formas rosas y púrpuras portan una flor sobredimensionada fuertemente moteada de rosa o púrpura sobre fondo blanco. La floración es melífera y nectarífera. Esta variedad se resiembra bastante fielmente, sin dificultad, sin por ello ser invasora.

Instala la Dedalera Monstruosa al sol de la mañana o a media sombra, en suelo húmico y fresco, en compañía de rosales antiguos, o de viváceas con flores simples como las aquilegias, las centaureas, las astrantias o los thalictros. Esta variedad sorprendente te permitirá disfrutar durante mucho tiempo de su floración en el borde de un bosquecillo o en el lado este de la casa. Esta planta extraña acompañará también en un sotobosque claro a geranios vivaces, heucheras, el follaje plumoso de los helechos. Disfruta también de esta criatura bastante fantástica en casa, confeccionando espléndidos ramos.