Sedum pachyclados

El Sedum pachyclados, también llamado Orpin alcachofa, es una pequeña vivácea muy compacta y con chupones que forma un tapiz de rosetas con hojas carnosas de color verde glauco, iluminadas por una delicada floración estrellada. Sus pequeñas hojas suculentas persistentes crean el efecto de un tapiz de rosas. Cubren perfectamente terrenos pobres y soportan fácilmente la sequía. Esta suculenta resistente se adorna con inflorescencias estrelladas de un amarillo pálido anaranjado en mayo-junio. Rústica y adaptable a cualquier suelo, incluso pobre y mediocre, se instala en bordillos de caminos secos, en rocallas o en macetas.

Originario de México, este Orpin vivácea es, sin embargo, muy resistente. Por lo tanto, si tu terreno no es rico, más bien seco, incluso pedregoso o algo calcáreo, puedes adoptar esta vivácea robusta (resiste a temperaturas inferiores a -15°C), que no requiere mantenimiento y promete animar el jardín con las visitas de mariposas. Los orpins son, de hecho, suculentas fáciles de cultivar y poseen flores y follajes de tonos variados que puedes aprovechar para crear múltiples paletas, ya sea en macizos, contenedores o rocallas. Por otro lado, si tienes un sustrato rico, fresco y pesado, también podrás plantarlos en bordes de macizos. Se aclimatarán sin problemas si añades grava y los colocas a pleno sol. Sobre todo, no deben sufrir exceso de humedad en invierno ni cubrirse de hojas secas, ya que podrían deteriorarse.

La especie pachyclados se presenta en forma de rosetas de hojas ovaladas planas, anidadas como una rosácea que no supera los 6 a 10 cm de altura y conectadas entre sí por chupones carnosos y rastreros de color marrón. Solo persiste la roseta de hojas en el extremo de los tallos. Estas portan pequeñas hojas oblanceoladas, coriáceas, con el extremo irregularmente dentado. Este follaje semi-perenne de tonos verde glauco que varían según las condiciones climáticas, como la mayoría de sus primos del mismo género. Sus inflorescencias en corimbos miniaturas, aunque escasos, son encantadores y delicados, compuestos por múltiples flores estrelladas de amarillo pálido con matices anaranjados en mayo-junio, que evolucionan con sutileza. El centro se oscurece y adquiere un cálido tono anaranjado.

El Sedum pachyclados es un acierto para aportar alegría a todos los rincones: a lo largo de caminos, al borde de la terraza, en muros de piedra seca, entre pavimentos, en macetas que podrás mover según tus deseos. Se combina fácilmente con todas las plantas de jardín rocoso, no requiere vigilancia y coloniza espacios abandonados. Por ello, es ideal para vegetalizar techos. En macizos, se coloca bajo arbustos expuestos al sur para cubrir terrenos pobres. Combina bien con Euphorbias y todos sus primos los Orpins para ofrecerte un decorado duradero sin esfuerzo.