Hosta Emily Dickinson

El Hosta 'Emily Dickinson' es una de las pocas variedades cuyas pequeñas campanillas lavanda son perfumadas. Se agrupan en espigas ligeras, elegantemente erguidas en medio de un hermoso follaje abigarrado de verde claro y verde oscuro, irregularmente marginado de amarillo pálido. Los márgenes palidecen en verano y se vuelven blanco-crema. Esta variedad de tamaño intermedio muestra un crecimiento bastante rápido. Fácil de cultivar y de lograr en terreno fresco, la coqueta 'Emily Dickinson' muestra su preferencia por las exposiciones de media sombra o el sol de la mañana.

Este Hosta, o Funkia, es una vivácea completamente resistente, que tiene, a partir de la primavera, un porte en matas anchas. Pertenece a la familia de las asparagáceas. 'Emily Dickinson' tiene como padres a la variedad 'Splash Neat' y un híbrido del Hosta plantaginea, una gran planta de floración blanca y perfumada. 'Emily Dickinson' alcanzará 40 a 50 cm de altura y 70 cm en flor, se extenderá al menos 60 cm, con un desarrollo bastante rápido. Forma una mata más ancha que alta. Es una planta de buena longevidad, con hojas caducas grandes y anchas, en forma de corazón; terminadas en una punta afilada, cuyas nervaduras son muy visibles. La lámina foliar es gruesa, mayormente verde claro con algunos trazos verde oscuro, rodeada de márgenes amarillos a crema bastante finos. Esta variedad también se distingue por su floración olorosa. Ocurre en julio-agosto.

El Hosta híbrido 'Emily Dickinson' es perfecto para los macizos de media sombra, para marcar la curva de un camino. Se asociará bien con numerosas viváceas como los corazones-de-María, los helechos, los epimedios y la Claytonia sibirica con la que forma bonitos dúos coloridos que requieren poco mantenimiento. Su amplio follaje ocultará los espacios vacíos dejados por los bulbos de floración primaveral. También lucirá bien en compañía de pulmonarias, brunneras y las grandes digitales o las pequeñas violetas. Puedes combinarlo con arbustos de media sombra como los naranjos de México, los acebos abigarrados, las azaleas. Todos los hostas crecen bien en macetas, y pueden permanecer varios años en el mismo contenedor. Elige un sustrato especial para geranios que usarás durante el periodo de vegetación. Mientras el follaje no sea demasiado denso, podrás regar por la parte superior de la maceta. Coloca luego un platillo para maceta debajo donde verterás el agua, manteniendo el nivel constante en verano.

La mayoría de las especies extendidas en los jardines occidentales fueron introducidas desde Japón. Comestibles, los hostas se llaman 'urui' en Japón donde se consumen habitualmente.