Dicentra spectabilis Valentine

El Dicentra 'Valentine' posee las mismas cualidades de rusticidad y robustez que su progenitor el Dicentra spectabilis, pero no supera los 35 cm de altura y desarrolla una vegetación llena de color: sus bonitas flores en forma de corazón, de un rojo sangre con toques blancos, se sostienen sobre elegantes bohordos floridos de color ciruela, inclinados con gracia sobre un follaje joven también muy colorido. Esta variedad reciente, que reinterpreta el Corazón de María tan querido por nuestras abuelas, no tiene igual para animar los rincones sombreados del jardín. ¡Acompáñalo, por ejemplo, con el Corazón de María 'White Gold', de follaje dorado y pequeños corazones blancos!

El Dicentra Valentine® proviene del Dicentra spectabilis, una especie botánica originaria de los bosques del este de Asia, del sur de Siberia y de Japón. Pertenece a la familia de las Papaveráceas, o de las Fumariáceas según las clasificaciones. Se trata de una planta perenne rizomatosa y caducifolia, que desaparece en invierno para reaparecer en primavera. De crecimiento rápido, forma en pocos años una mata tupida que no superará los 35 cm de altura por 30 cm de envergadura en el caso de 'Valentine'. Este Corazón de María se propaga lateralmente mediante rizomas rastreros, lo que le permite extenderse si las condiciones son favorables y le confiere un aspecto bastante exuberante mientras el suelo no se seque.

Sus tallos, de color púrpura, emergen en primavera. Portan hojas divididas, pinnadas, de aspecto delicado. Su color, que va del púrpura al bronce cobrizo al brotar, evoluciona hacia un verde ligeramente polvoriento de gris en las hojas adultas. La floración ocurre hacia finales de primavera, desde el mes de mayo según el clima, y puede prolongarse hasta julio si el suelo permanece fresco. En caso contrario, el Corazón de María entra en periodo de latencia en verano. En el extremo de los tallos aparecen de 3 a 15 flores colgantes, de 3 a 5 cm de alto por 2 a 3 cm de ancho. Cada una está compuesta de pétalos externos que forman un corazón y pétalos internos en forma de flecha. En 'Valentine', las flores son de un rojo intenso, pero blancas en la "punta" del corazón. Tras la polinización por insectos, dan lugar a vainas que contienen semillas redondas y negras recubiertas de una sustancia blanca y mucilaginosa.

El Corazón de María Valentine es una planta de cultivo realmente sencillo en la mayoría de nuestras regiones, pero no tolera los climas demasiado cálidos y secos en verano. Encuentra su lugar en los pequeños jardínes amurallados o de inspiración naturalista, pero siempre en lugares frescos y sombreados. Puede combinarse con otras viváceas que no teman la competencia radicular de árboles o arbustos. Acompáñalo con el Sello de Salomón, fucsias resistentes, corydalis, la Consuelda media púrpura, Anémonas del Japón, o un tapiz de vincas, por ejemplo. En primer plano de un macizo púrpura, combínalo con el Coralito 'Black Out', la Astrantia 'Moulin Rouge' o el Carex comans 'Milk Chocolate'.

La mayoría de los Corazones de María entran en reposo en verano, lo cual no tiene consecuencias negativas en la recuperación de las plantas.