Pachysandra terminalis - Diamante

El Pachysandra terminalis es una vivácea de porte tapizante. Este pequeño arborito, cercano al boj, es muy resistente, por lo que puedes cultivarlo en el jardín en cualquier época del año. El Pachysandra se cultiva por su hermoso follaje que le permite ser un excelente cubresuelos en lugares sombreados. El follaje es de un verde oscuro brillante marginado de plata. Las hojas persistentes, de 5 a 10 cm de largo, son ovaladas, dentadas en los extremos. Están agrupadas en ramilletes al final de cortas ramas.

El tocón es estolonífero, es decir, dispone de un tallo rastrero sobre el suelo que produce nuevas plantas. Es bastante poco rastrero. En madurez, esta vivácea puede alcanzar 30 cm de alto por 50 cm de envergadura. El Pachysandra de Japón da en junio pequeñas flores masculinas blancas, reunidas en espigas de 2 a 3 cm de largo al final de los tallos. Son ligeramente perfumadas y surgen en los retoños de los años anteriores. Las flores femeninas, por su parte, permanecen bajo el follaje y a veces dan lugar a grandes frutos blancos. Es una planta que toma su tiempo para extenderse.

Cultívalo al abrigo de árboles o arbustos de follaje caduco o incluso al borde de los macizos o en los bordillos. Es una planta adaptada a los jardines rocosos. Puedes cultivarla en macetas. Originaria del norte de China y Japón, el Pachysandra, por su carácter robusto y su sobriedad, puede incluso cubrir lugares donde pocas plantas sobreviven.