Athyrium filix-femina - Helecho hembra

El Athyrium filix-femina, llamado comúnmente Helecho hembra, es una gran vivácea grácil, con frondas de un verde tierno, divididas en lóbulos profundos que le confieren un porte muy ligero. Planta de frescor y sombra, es muy resistente y poco propensa a enfermedades. Perfecta para jardines sombreados, bordes de charcas naturales o bosques frescos.

El Helecho hembra, en latín Athyrium filix-femina, pertenece a la familia de las Athyriaceae. Se trata de una planta vivácea originaria de todas las regiones templadas del hemisferio norte. Con un crecimiento bastante lento, este helecho se establece de forma duradera mediante sus rizomas rastreros si las condiciones son adecuadas. Alcanzará 120 cm de altura y 80 cm de envergadura, formando finalmente amplias matas a partir de un punto central. El follaje bipenado, caduco, presenta un tono verde tierno muy luminoso. Está finamente dividido en numerosas pínnulas lobuladas. El envés de las hojas está cubierto de esporas anaranjadas.

Planta el Athyrium filix-femina en suelo húmico, fresco, neutro a ligeramente ácido. Esta vivácea prosperará en la sombra o en una exposición de media sombra con sol matutino, bajo árboles o arbustos con los que no compite. El follaje se seca lentamente a partir de noviembre, pero evita cortarlo antes de finales de marzo, ya que protege bien el tocón. Durante el primer año de cultivo, es necesario vigilar el riego de la planta joven para facilitar su establecimiento. El Athyrium filix-femina es ante todo una planta de sombra húmeda o de media sombra que expresará todo su potencial en bosques o cerca de puntos de agua, donde se reflejará su elegante silueta. Combínala idealmente con coníferas, fucsias y hortensias. Se adapta bien al cultivo en macetas grandes, a la sombra, lo que permitirá disfrutar de cerca su follaje a la vez aéreo y grácil.

Dato interesante: Gran favorita de los helechales victorianos de finales del siglo XIX, el Athyrium filix-femina ha dado lugar a numerosas variedades hortícolas con frondas abigarradas o de forma curiosa, como las variedades ‘Victoriae’ o ‘Frizelliae’.