Semillas de Xeranthemum Superbissimum Purpureum - Inmortal

La Siempreviva anual 'Superbissimum Purpureum' (Xeranthemum annuum) seducirá con sus flores dobles de un violeta púrpura intenso, de textura papirácea. Ideales para ramos secos, estas flores conservan su color durante mucho tiempo. Fácil de cultivar, esta planta anual se siembra en primavera, bajo cubierta o en terreno abierto según las regiones, para una floración generosa desde el verano hasta los primeros fríos del otoño. Hace maravillas en las zonas soleadas del jardín o en grandes macetas de verano.

'Superbissimum Purpureum' es una selección hortícola de la especie Xeranthemum annuum, originaria de las llanuras secas de Europa del Este y Asia Occidental. Se destaca por su floración particularmente rica en matices violetas, desde el malva intenso hasta el púrpura sedoso. Cada planta forma una mata ramificada de 50 a 60 cm de altura, cubierta de un follaje estrecho, gris plateado y con pelusa, que realza las inflorescencias brillantes. Estas últimas, en capitula de 4 cm de diámetro, están compuestas por brácteas secas y brillantes que reemplazan a los pétalos. Esta estructura única les permite permanecer intactas durante mucho tiempo, incluso una vez cortadas. La floración comienza aproximadamente tres meses después de la siembra, y se renueva de julio a septiembre-octubre.

La siempreviva anual 'Superbissimum Purpureum' se desarrolla bien en suelos ligeros, incluso calcáreos y bastante secos, a pleno sol. Embellece los macizos campestres y aporta un toque de color duradero a los bordillos. Asóciala con el Amaranto globoso QIS Formula Mix, el aciano 'Classic Fantastic', con la amapola 'Pandora' y la Lágrimas de la Virgen 'Bunny Tails' (Lagurus ovatus), una bonita gramínea anual que también se siembra de manera natural. También puedes sembrarla en maceta para acompañar tus plantas anuales en la terraza.

Las flores de las siemprevivas se prestan perfectamente al arte del ramo seco. Para preservar toda su belleza, conviene cortar los tallos cuando los capitula están bien formados, pero no totalmente abiertos. Cuélgalos boca abajo, en un lugar seco, oscuro y ventilado. Una vez que los tallos estén bien secos, puedes quitar las hojas para conservar solo las flores, listas para formar parte de composiciones florales duraderas y llenas de encanto.