Viburnum rhytidophyllum - Viburno

El Viburnum rhytidophyllum, también llamado Viorna de hojas arrugadas, es un gran arbusto de hoja perenne, que debe su nombre al aspecto curiosamente arrugado de sus largas hojas ovaladas que le dan toda su originalidad. Sus grandes hojas acanaladas y colgantes, de un verde oscuro y brillante, son aterciopeladas de gris en el revés. Forman un hermoso marco para su floración primaveral, que brota en grandes corimbos planos de color blanco-crema. La fructificación también es bastante decorativa, en forma de pequeñas bayas rojas y luego negras en la madurez, ambos colores a menudo coexistiendo en un mismo ejemplar. Cultivo fácil al sol, en suelo ordinario, incluso calcáreo, pero profundo y fresco. Las viornas son arbustos fáciles de cuidar que se integran bien en setos libres, mezclando diferentes especies o combinándolas con otros arbustos florales.

El Viburnum rhytidophyllum pertenece a la familia de las Caprifoliaceae, que incluye numerosas especies de Viornas caducifolias o persistentes, con floración más o menos perfumada. Esta es originaria del centro-oeste de China y se utiliza en nuestros parques y jardines europeos desde hace mucho tiempo debido a su crecimiento rápido, su facilidad de cultivo y el poco mantenimiento que requiere. Es un gran arbusto persistente, con un porte imponente y frondoso, a menudo tan ancho como alto. En la madurez, alcanzará de 3 a 5 m en todas direcciones, con un crecimiento rápido. Las hojas son enteras, verde oscuro y brillantes en el haz, suaves y mates en el revés, oblongas, profundamente acanaladas, miden de 15 a 20 cm de largo. La floración es un evento que toma su tiempo: los botones, verde ácido, aparecen agrupados en cimas aplanadas y redondeadas, de 20 cm de ancho, en los extremos de las ramas, desde el mes de noviembre. Se abren gradualmente en mayo-junio, en pequeñas flores de un blanco-crema a veces rosado. Esta floración es a veces perfumada. Es seguida por la formación de pequeños frutos ovoides rojos, que se vuelven negros al madurar, deleitando a los pájaros. Para obtener una buena fructificación, se recomienda plantar varios ejemplares.

El Viburnum rhytidophyllum es un excelente arbusto para setos libres, que solo necesita una exposición soleada y un suelo bastante profundo y no demasiado seco para prosperar. También forma un hermoso ejemplar plantado como fondo. Combínalo, por ejemplo, con el Viburnum x bodnantense, caducifolio, de floración temprana, con el Viburnum lantana muy colorido en otoño, con lilas, membrilleros de Japón, almendros de China, Viburnum davidii, Rosa complicata, Cotoneaster lacteus...