Arce japonés - Acer palmatum

El Acer palmatum, conocido también como arce japonés, es un arbusto apreciado por sus hojas palmeadas, muy gráficas, de un bonito verde tierno que se enciende en otoño.

Originario del este de China, Corea y Japón, este arce japonés resistente forma una copa extendida y redondeada, cuyos jóvenes retoños presentan una corteza marrón. Desarrolla magníficas hojas caducas, de color verde tierno, opuestas y palmeadas, de 5 a 10 cm de largo, divididas en 5 a 9 lóbulos dentados, que adquieren preciosos tonos rojo anaranjados en otoño. Las bonitas flores rojizas, agrupadas en pequeños ramilletes en abril, son insignificantes, pero los frutos con alas curvadas, rojos, de 3 cm de largo, resultan interesantes a partir de septiembre.

El Acer palmatum crece preferiblemente en un suelo ácido, fresco, fértil, flexible y bien drenado, en una ubicación semi-sombreada y protegida de los vientos fríos y secos. El alto calor provoca quemaduras en el follaje, que cae rápidamente. Acolcha, riega y rocía el follaje en las noches de fuerte calor. La poda invernal se limita a equilibrar las ramas. Trata contra las cochinillas y el Verticillium.

El Acer palmatum es ideal aislado en un césped sombreado o para dar sombra a macizos de tierra de brezo, acompañado de azaleas, pieris, rododendros y brezos. Puede formar un magnífico bonsái para cultivar en maceta plana.

Consejo: Trata con mezcla bordelesa para evitar los ataques de Verticillium.