Ciruelo Stanley

El Ciruelo Quetsche Stanley es una variedad vigorosa, de rápida fructificación y con una producción regular y abundante. Produce frutos grandes, alargados, de color violeta-rojo muy oscuro, casi negros en su madurez. Su pulpa es verde, firme y dulce. Son ideales para la elaboración de ciruelas pasas. La cosecha se realiza a principios de septiembre. El Ciruelo Quetsche Stanley es autopolinizante. Además, es un excelente polinizador.

La palabra Quetsche significa, en alsaciano, Ciruela de Damasco. Por lo tanto, los ciruelos Quetsche provienen de Siria, un país que desde la Edad Media suministra numerosas variedades de ciruelas. La variedad Quetsche Stanley fue seleccionada en Estados Unidos, en la Estación Geneva, Nueva York, en 1926. Es el resultado del cruce: Ciruelo x Grand Duke.

Este árbol frutal alcanza naturalmente hasta 8 m de altura en su madurez. Su silueta esbelta, gracias a su porte erguido, es muy apreciada en el jardín. Es poco exigente en cuanto al tipo de suelo, excepto que no debe contener caliza.
Sus hojas son ovaladas, casi oblongas, con bordes dentados y ligeramente pubescentes.
La floración ocurre a finales de marzo. Es bastante prolongada. El árbol se cubre completamente de flores blancas que aparecen en las ramas del año anterior. Estas flores son autopolinizantes. Además, el árbol es un excelente polinizador para otros ciruelos.
Los frutos grandes y alargados son de color violeta-rojo muy oscuro, casi negros en su madurez. Su pulpa es verde, firme y dulce. Son ideales para la elaboración de ciruelas pasas.

Las ciruelas se pueden consumir crudas directamente del árbol, en ensaladas de frutas, postres, repostería o como acompañamiento de carnes y platos. Se transforman en mermeladas, frutas en almíbar, compotas, entre otros. También se destila para obtener aguardiente. Puedes secarlas al sol durante el verano, deshuesadas y colgadas en guirlandas, o en el horno.