Plantar tomates en mini macetas
Una solución económica y fácil
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Plantar tomates en minimacetas es una forma económica de obtener hermosas plantas. Es muy práctico, porque no necesitas sembrar: tus tomates están listos para ir al huerto si las temperaturas exteriores lo permiten. De lo contrario, aquí tienes algunos consejos para cuidarlos mientras esperas plantarlos en el jardín, una vez que lleguen los días cálidos. Gracias a este método, ahorras Tiempo y aseguras un buen arraigo de las plantas. ¡Descubre nuestros consejos para cultivar con éxito tomates en minimacetas y obtener una cosecha abundante!
¿Dónde plantar tus tomates en cepellón?
Los tomates necesitan calor y al menos 6 horas de sol al día para fructificar. Deben colocarse al sol, idealmente protegidas de los vientos fríos. Observa con atención tu jardín para determinar su exposición solar y elige en consecuencia la ubicación más adecuada. La plantación bajo cubierta (invernadero, túnel, con o sin calefacción) puede ser una buena solución en regiones frías o lluviosas, pero también para adelantar la cosecha.
¿En qué tipo de tierra o sustrato plantar las minimacetas de tomate?
Los tomates requieren un suelo fértil, rico en nutrientes y aireado para permitir que la planta desarrolle fácilmente sus raíces. Se recomienda un aporte de compost o estiércol bien descompuesto, del orden de 3 kg por metro cuadrado.
¿Cuándo y cómo plantar?
Nuestros tomates en mini macetas requieren cuidados específicos que no pueden esperar: sácalos de los embalajes de transporte al abrir tu paquete y remójalos si es necesario en un poco de agua no helada. Nunca plantes una mini maceta seca.
Según tu región y el calendario,
1) Los últimos riesgos de heladas han pasado: la plantación se realiza directamente y sin demora, en macetas o en el jardín.
2) Los riesgos de heladas aún persisten: mientras esperas la plantación definitiva (después de los «Santos de Hielo»), planta las mini macetas en macetas, para ello:
- trasplántalas a macetas o contenedores, en un sustrato rico y ligero (idealmente mantillo)
- trasplanta colocando la mini maceta en el contenedor, después de hacer un agujero lo suficientemente grande para alojarla. Entierra la planta hasta los cotiledones (las dos primeras hojas que no se parecen a las hojas siguientes), el tallo enterrado desarrollará nuevas raíces,
- mantén tus plantas en un lugar cálido y luminoso y recuerda regar: el sustrato debe permanecer húmedo, pero no encharcado.
Trasplantar en maceta y dejar crecer en un local con calefacción
Si es posible, unos diez días antes de la plantación definitiva en el huerto, acostumbra progresivamente tus planteros a las condiciones exteriores sacándolos unas horas al día cuando haga buen tiempo: las temperaturas ligeramente más frescas y la acción de una brisa suave les permitirán endurecerse y llegar fuertes y robustos al jardín.
Durante la plantación, respeta un espacio de 50 a 60 cm en todas direcciones. Es posible adelantar un poco la plantación si vives en un clima suave o si dispones de un refugio (invernadero con calefacción o invernadero frío).
Atención, si tus plantas están injertadas, no debes enterrar el punto de injerto.
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