Picea abies Zagwiżdże - Pícea común

El Picea abies 'Zagwiżdże' es un cultivar enano de pícea común, de origen polaco, raro en cultivo. Dotado de un porte plano y esférico, bastante regular, esta conífera desarrolla brotes erectos, rígidos y curvados, que apuntan hacia el exterior. Son de color verde con un ligero tono azulado. De crecimiento lento, es ideal para un jardín pequeño, plantado aislado, o para animar una rocalla o una maceta en la terraza. Es una variedad sensible a la sequía del suelo y del aire, así como a la contaminación.

El Picea abies, también llamado Pícea común o Pícea roja, es una conífera perenne perteneciente a la familia de las pináceas. Esta especie es originaria del norte de Europa, más concretamente de Escandinavia. En su entorno natural, el árbol presenta un porte típicamente cónico y piramidal, y puede alcanzar los 30 m de altura, e incluso más en Europa del Este. Esta especie se utiliza tradicionalmente como árbol de Navidad en Europa. Aprecia los suelos drenados y frescos y no teme las temperaturas muy bajas.

La variedad 'Zagwiżdże', derivada de esta especie, es una forma enana con porte redondeado y aplanado. Descubierta por el profesor Włodzimierz Seneta en una pícea que crecía en Zagwiżdże, esta variedad fue introducida en el mercado en 2004 por los viveros Szmit en Pęchcin. De crecimiento lento, aún no hay mucha información sobre su tamaño definitivo, pero alcanza a los 10 años 1 m de altura y diámetro y se mantiene bien compacto. Presenta ramas cortas y rígidas, dispuestas en espiral sobre las ramas muy escalonadas. Sus brotes jóvenes primaverales son de un verde muy tierno y luminoso, luego su follaje se oscurece y se vuelve verde vivo con un tono azulado. Sus pequeñas hojas perennes son agujas rígidas, muy punzantes, implantadas alrededor de las ramas, en forma de escobilla. El sistema radicular de las píceas es superficial y rastrero, lo que las hace difíciles de trasplantar cuando son adultas y especialmente sensibles al viento.

El abeto enano 'Zagwiżdże' se distingue por su apariencia original y su pequeño tamaño no requiere ningún mantenimiento. Se plantará en rocallas o pequeños macizos. Bien adaptado al cultivo en maceta, también decorará la terraza. Este abeto se integra perfectamente en un escenario mineral y en un decorado contemporáneo. Puede combinarse con coníferas enanas de porte muy diferente, columnares o rastreras. Las coníferas estructuran un espacio de manera duradera y sustituyen ventajosamente a los bojes podados. Forman hermosas asociaciones con las brezos y la hierba de Hakone, por ejemplo.