Clematis: ¿Qué variedad elegir?

¿Cuál es el efecto deseado?

• ¡Para tener flores en pleno invierno!

Para salir de la monotonía invernal, elige las clemátides de Navidad, Clematis cirrhosa. Ofrecen una floración original, a menudo blanco crema con manchas rojas. Las flores tienen forma de campanillas con cuatro pétalos. Según la variedad, pueden florecer entre octubre y marzo. Las hojas son persistentes y brillantes. Lamentablemente, son poco resistentes y necesitan protección invernal. Te recomendamos la variedad Clematis cirrhosa ‘Freckles’. Descubre también la clemátide ‘Winter Beauty’, ¡que lleva muy bien su nombre! Te ofrecerá de diciembre a febrero pequeñas flores blancas en forma de campanillas. Sin embargo, ¡es delicada de cultivar! Para una floración un poco más tardía, puedes elegir la clemátide de Armand, Clematis armandii, que florece a finales del invierno, a partir de marzo.

Clematis ‘Winter Beauty’, Clematis cirrhosa ‘Freckles’ y Clematis armandii ‘Snowdrift’

Descubre también nuestra ficha consejo: 6 clemátides de floración invernal.

• Flores continuas todo el verano: ¡las clemátides de larga floración!

Algunas clemátides ofrecen floraciones interminables, ¡aprovéchalas! Es frecuente que los híbridos tengan floraciones trepadoras que se suceden. Es el caso de Clematis ‘Westerplatte’, que ofrece durante todo el verano y en oleadas sucesivas una floración perfumada, de un rojo intenso. En cuanto a las clemátides ‘Baby Star’ y ‘Piilu’, ofrecen en primavera una floración doble o semidoble, y luego una segunda floración, simple, a finales del verano. La primera tiene elegantes flores blancas, mientras que la segunda aportará más color, con sus flores rosas y estambres amarillos. Igualmente, se aprecian las clemátides jackmanii y ‘Judía enana’ por su generosa floración que dura todo el verano.

Clematis ‘Westerplatte’, Clematis jackmanii ‘Forever Friends’ y Clematis texensis ‘Judía enana’

• ¡Para una floración original!

¡Redescubre las clemátides! Apuesta por la originalidad con las flores blanco crema manchadas de púrpura de Clematis cirrhosa ‘Freckles’, ¡las flores manchadas son bastante raras en las clemátides! Déjate sorprender por la variedad –tan bien nombrada– ‘Octopus’, cuyos largos sépalos violetas se extienden en todas direcciones como los tentáculos de un pulpo. También existe en una variante azul, ‘Spiky’. Enamórate de Clematis pitcheri y sus pequeñas campanillas azules y blancas, de aspecto abultado y muy redondeado. En cuanto a la clemátide ‘Taiga’, es una variedad realmente impresionante por sus grandes flores violeta y blanco crema. Los sépalos bicolor situados en el centro se abren progresivamente, lo que permite que la flor cambie de aspecto durante su desarrollo. ¡Una variedad tan refinada que resulta casi hipnótica! Descubre también las flores blanco crema y verde claro de Clematis ‘Sen no Kaze’. ¡El color verde es muy poco frecuente en las flores! En cuanto a la clemátide tangutica ‘Golden Harvest’, tiene pequeñas flores amarillas en forma de campanillas, muy diferentes de las clemátides habituales. Por último, descubre las flores despeinadas de la clemátide ‘Rosalyn’, con sépalos rojos y finos, que le dan un aspecto muy desordenado.

→ Consulta también nuestro artículo sobre 7 clemátides de floración original

Clematis ‘Rosalyn’, Clematis pitcheri y Clematis ‘Spiky’

• Para un estilo muy natural y sencillo

Prefiere las variedades de flores pequeñas, simples o en forma de campanillas. Evita la exuberancia de las grandes flores dobles y las clemátides del grupo Patens. Enamórate de las delicadas campanillas de Clematis fusca. La variedad ‘Winter Beauty’ luce en pleno invierno hermosas flores blancas en forma de campanillas, especialmente elegantes. Opta por las especies botánicas, como la clemátide vitalba, Clematis vitalba, que se encuentra de forma espontánea en Francia. Descubre también Clematis integrifolia, una pequeña clemátide herbácea que ofrece delicadas flores azules en forma de campanillas. ¡Las clemátides de flores pequeñas tienen un carpe increíble! Aportan un innegable toque salvaje y natural al jardín.

Clematis fusca, Clematis vitalba y Clematis integrifolia (foto Michael Wolf)

• ¡Para una floración sofisticada!

Opta por los híbridos de flores grandes y las variedades de flores dobles. La floración más espectacular es sin duda la de Clematis ‘Taiga’. Ofrece flores bicolor, violeta y blanco crema, con un aspecto muy refinado y sofisticado. ¡Es realmente diferente de las demás clemátides! Igualmente exuberante, la variedad ‘Multi Blue’ tiene grandes flores dobles, azul violeta, más claras en el centro. En cuanto a Clematis viticella ‘Purpurea Plena Elegans’, ofrece una floración doble, rosa.

Clematis ‘Taiga’, Clematis ‘Multiblue’ y Clematis ‘Purpurea Plena Elegans’

• ¡Las clemátides de follaje perenne!

Descubre la clemátide cerosa, Clematis cirrhosa. ¡Tiene flores originales en pleno invierno! Nos sorprende con sus flores blanco crema manchadas de rojo o púrpura. También puedes elegir Clematis armandii, la clemátide de Armand. Florece un poco más tarde, ofreciendo en primavera una floración blanca y perfumada.

Clematis cirrhosa var. balearica (foto Peganum), Clematis armandii ‘Apple Blossom’ y Clematis ‘Winter Beauty’

¿Para qué lugar y qué uso?

• Para un cultivo en maceta

Algunas clemátides se adaptan perfectamente al cultivo en macetas, permitiendo así florecer una terraza o un balcón. Elige variedades con porte compacto y de crecimiento lento. Clematis ‘Baby Star’ es especialmente adecuada: no supera los 1,50 metros de altura y ofrece en primavera y a finales de verano una abundante floración de un blanco puro. Si prefieres una variedad más colorida, elige Clematis ‘Piilu’: se cubre de multitud de flores con sépalos rosados y estambres amarillos. Descubre también las clemátides ‘Astra Nova’, Clematis ‘Westerplatte’ o ‘Early Sensation’. Para algo más original, puedes optar por la clemátide herbácea Clematis integrifolia ‘Twinckle’. Las clemátides alpina son adecuadas porque crecen lentamente. Evita, en cambio, Clematis terniflora, una clemátide de gran desarrollo. Te recomendamos combinarlas con otros pequeños arbustos o viváceas. Ayudarán a mantener un suelo fresco y drenante.

Clematis ‘Baby Star’, Clematis ‘Astra Nova’ y Clematis ‘Piilu’

• ¡Una clemátide no trepadora, para un macizo!

Las clemátides herbáceas se integran muy fácilmente en los macizos. Descubre Clematis heracleifolia, una clemátide muy original que ofrece en otoño pequeñas flores azul malva, en forma de campanillas, y tiene grandes hojas: ¡hace todo lo contrario a las variedades habituales! Déjate seducir por las hermosas flores en campanillas, blancas y azul claro, de la bonita clemátide integrifolia ‘Twinckle’. Es perfecta para cultivo en maceta o en macizo. También puedes elegir Clematis recta ‘Purpurea’: tiene numerosas flores blancas, realzadas por sus hojas y tallos púrpuras.

Clematis ‘Twinkle’, Clematis heracleifolia, Clematis integrifolia (foto H. Zell)

• ¡Una clemátide como planta cubresuelos!

¡Sí, las clemátides no siempre son trepadoras, también pueden rastrerar y cubrir el suelo con multitud de flores! La clemátide ‘Robert Brydon’ te ofrecerá un notable tapiz de flores blanco-malva pálido. Descubre también las hermosas flores blancas estrelladas, delicadamente perfumadas, de Clematis mandshurica.