Picea pungens Jan Byczkowski - Pícea de Colorado

El Picea pungens 'Jan Byczkowski' es una selección enana de la Pícea de Colorado de porte ampliamente cónico, de estructura regular, que se anima con brotes jóvenes amarillos muy luminosos en primavera. Este color persiste hasta 6 semanas, luego los brotes adquieren un tono natural azul-gris como el follaje maduro de esta conífera. La coloración amarilla de los brotes dura más tiempo si el abeto recibe mucho sol. Será un hermoso ejemplar en un jardín pequeño.

Originario de la costa oeste de Estados Unidos y las Montañas Rocosas de Norteamérica, hasta Canadá, el Picea pungens, que también lleva el nombre de Pícea de Colorado o Pícea azul, es una conífera perenne muy resistente perteneciente a la familia de las pináceas. En su entorno natural, crece lentamente, presenta un porte cónico elegante y muy regular, sostenido por ramas horizontales muy escalonadas. Este árbol puede alcanzar de 25 a 40 m de altura, soporta suelos ligeramente calcáreos y cierta sequía. Pero su preferencia son tierras un poco ácidas y frescas en profundidad. Su ubicación deberá ser bien pensada, ya que no le gusta ser trasplantado.

El Picea pungens 'Jan Byczkowski' es una variedad seleccionada en Polonia en el vivero J. Z. B. Byczkowski en Kostrzyn e introducida al mercado en el año 2000. Se caracteriza por un tamaño moderado y un follaje de un azul plateado brillante y brotes jóvenes bien amarillos. A los 10 años, esta conífera forma una pirámide bastante pequeña que alcanza unos 2 m de altura y hasta 1,2 m de ancho. Su altura aumenta unos 20 cm al año, su crecimiento es bastante lento. Produce ramas cubiertas de agujas muy cortas y punzantes, dispuestas en cepillos densos y radialmente alrededor de las ramas. Sus brotes primaverales son de un hermoso amarillo luminoso, luego viran al azul plateado y lo mantienen durante todo el año.

La Pícea de Colorado 'Jan Byczkowski', cuando es joven, necesita ser tutorada para desarrollar un porte agradable y regular, pero forma una flecha principal bastante rápido en comparación con otras variedades. Es un adorno reluciente todo el año en el jardín. Se adapta bien a muchas situaciones, en diversos climas, siempre que el suelo esté drenado y no sea demasiado calcáreo y la exposición sea soleada. Su pequeño tamaño lo destina a grandes rocallas o macizos y su silueta se realzará como ejemplar aislado. Esta conífera combina bien con lo mineral en el jardín. Puedes asociarlo con anuales de primavera o verano, que resaltarán su follaje. Las coníferas se imponen naturalmente en un decorado contemporáneo. Combina bien con brezos o con bulbos tempranos como las campanillas de invierno para plantar en gran tapiz.