Lechuga batavia Gloire du Dauphiné

La Lechuga batavia Gloria del Delfín es una variedad antigua, verde lavada de rojo, con hojas crujientes y brillantes, muy abollonadas. La cabeza está bien formada y voluminosa. Esta lechuga de verano y otoño se adapta perfectamente a los climas fríos. Se siembra de marzo a junio y en agosto y septiembre para luego ser cosechada de mayo a noviembre.

Si la Lechuga es uno de los vegetales más apreciados (se consumen 4,2 kilos por año y por persona), es tanto por su frescura, su crocancia como por sus cualidades gustativas y nutricionales. Se consume cruda en ensaladas, pero también cocida, para acompañar a los guisantes verdes, por ejemplo.

Vegetal foliar por excelencia, la Lechuga es una planta anual que pertenece a la gran familia de las Asteráceas. Su nombre latino, Lactuca sativa, hace referencia tanto a la savia blanca (lactuca) que se desprende al cortarla como al hecho de que se cultiva (sativa).

Es un vegetal imprescindible en todo huerto que se precie, y existen tantas variedades que es posible cultivarla casi todo el año.

El cultivo de la Lechuga es fácil siempre y cuando se respete el calendario de cultivo de cada variedad. Su crecimiento es rápido y se desarrolla en cualquier tipo de suelo, siempre y cuando sea rico y se mantenga fresco.

Cosecha: Se realiza simplemente con un cuchillo cuando alcanza la madurez.

Conservación: La Lechuga se conserva algunos días en el refrigerador, pero para disfrutar al máximo de su frescura, le recomendamos consumirla justo después de la cosecha.

El consejo del jardinero: Durante las fuertes calores estivales, las lechugas expuestas al pleno sol tienden a marchitarse lamentablemente. Para evitar este fenómeno, recuerde protegerlas de los rayos demasiado intensos con cajas volteadas. En nuestro caso, las lechugas de verano no se cultivan en filas, sino que se intercalan en diferentes lugares: al pie de los frijoles trepadores, en medio de los pepinos y calabazas cuyo follaje proporciona una sombra beneficiosa.