Clavellina - Dianthus deltoides Arctic Fire (semillas)

El Dianthus deltoïdes Arctic Fire, también llamado clavel deltoide Arctic Fire, o clavel rastrero Arctic Fire, forma un pequeño cojín persistente y tapizante muy florífero, con flores simples blancas de pétalos festoneados, animadas por un ojo rojo intenso que rodea un corazón rosa. Esta vivácea de rápido crecimiento combina resistencia, frugalidad y un alto nivel de floración. Resistente a la sequía, es ideal para rocallas y muretes, a pleno sol. Si se siembra muy temprano, bajo un invernadero frío, puede florecer el primer año. Cultívalo en suelo drenado, incluso pobre, y al sol.

El clavel deltoide 'Arctic Fire' pertenece a la familia de las cariofiláceas. Es un cultivar derivado del Dianthus deltoïdes, originario de Europa y Asia templada, donde crece en zonas secas, brezales o colinas, en linderos de bosques, sobre céspedes pobres. El crecimiento de este clavel es rápido. Su tamaño adulto no superará los 20 cm de altura, en flor, con una extensión de 20 cm o más. Este clavel forma una pequeña mata postrada de porte tapizante. Sus hojas lineales, de color verde vivo, son persistentes y flexibles, apretadas sobre tallos delgados. La floración comienza en mayo y junio, hasta agosto si el suelo no está demasiado seco. La planta se cubre entonces sin interrupción de pequeñas flores blancas rosadas con pétalos festoneados, realzadas por un corazón rosa rodeado de un halo rojo vivo e intenso. Son agradablemente perfumadas, en el extremo de tallos generalmente unifloros.

Instala el clavel deltoide 'Arctic Fire' en un lugar despejado, en una pendiente, donde pueda extenderse al sol. Quedará magnífico en una rocalla, en la pendiente de un talud bien drenado, o en la cima de un muro de piedra seca. Esta planta puede adornar la base de arbustos en macetas grandes, decorar grandes contenedores o jardineras alpinas. Antes de la plantación, en tierras pesadas o arcillosas, añade algunas paladas de grava y arena gruesa para facilitar el drenaje del agua. El clavel deltoide combina muy bien con plantas de origen alpino o montañoso como las alyssum, las saponarias, los phlox tapizantes (P.subulata y P.douglasii), las aubrietas, los iberis y los heliantemos.

El nombre genérico proviene del griego 'dios' por 'Júpiter o divino' y de 'anthos' por 'flor'. Estos dianthus, o 'flores divinas', fueron bautizados así por Teofrasto, debido a su dulce fragancia y belleza. Deltoides hace referencia a 'delta', la letra griega, relacionada con la forma de los pétalos.