Pino de California - Pinus insignis

El Pino de California, en latín Pinus radiata o Pinus insignis, es una especie californiana muy elegante y de crecimiento rápido, bien adaptada a los climas templados y húmedos. Por esta razón, es ampliamente utilizado en toda la costa atlántica de nuestro país, tanto para la reforestación como para formar setos cortavientos muy eficaces, incluso a orillas del mar. Este conífero elegante tiene en sus primeros años un porte cónico bien regular, que se vuelve más columnar con la edad, y se viste de un hermoso follaje de un verde intenso y brillante, decorativo durante todo el año. Resistente hasta aproximadamente -15°C una vez establecido, aprecia los suelos con tendencia ácida, bien drenados pero que permanezcan frescos en verano.

El Pinus radiata es un conífero de la familia de las Pináceas, originario del sur de la costa oeste de los Estados Unidos, más concretamente de Monterey, una ciudad situada en California. En su entorno natural, puede alcanzar entre 25 y 70 m de altura, pero rara vez superará los 15 m de altura por 4 m de envergadura en nuestros climas. Presenta un porte característico, piramidal cuando es joven, alargándose en columna con los años. Su crecimiento es rápido, del orden de 1 m por año.Su tronco, más o menos esbelto, a veces corto y macizo, sostiene ramas estructurales muy gruesas. La corteza es jaspeada en tonos marrón claro y grisáceos. Su follaje, de un verde-azulado oscuro, está compuesto por agujas de 8 a 20 cm de largo, rectas, ligeramente retorcidas, generalmente agrupadas de tres en tres.Los conos, de 10 a 15 cm de largo, de color marrón claro, están todos orientados hacia el tronco y permanecen mucho tiempo adheridos al árbol antes de caer.

El Pino de California es una especie bien adaptada a los climas templados y húmedos, sensible a las heladas severas cuando es joven, que no tolera ni las sequías prolongadas ni las fuertes calores. Este hermoso árbol ornamental de follaje denso se puede plantar aislado o en un seto perenne a orillas del mar. Sin embargo, a pesar de todas sus cualidades, este árbol produce mucha madera muerta y una sombra muy densa. Su sistema radicular es bastante superficial, aunque potente, lo que puede hacerlo sensible a las fuertes tormentas: es preferible no plantarlo demasiado cerca de una construcción.