Rosal Apricot Drift - Rosal tapizante

El Rosal tapizante Apricot Drift® es una variedad compacta y florífera, perfectamente adaptada a los macizos, bordillos, rocallas y macetas. Forma parte de la gama Drift® de Meilland Richardier, y destaca por su floración continua y generosa, desde la primavera hasta las primeras heladas. Sus flores muy dobles, de aproximadamente 5 cm de diámetro, muestran un color albaricoque melocotón que evoluciona hacia tonos rosados al abrirse, añadiendo sutiles variaciones en las composiciones florales. Dotado de un porte bajo, redondeado y tapizante, este rosal cubre eficazmente el suelo manteniendo una silueta armoniosa.

Perteneciente a la familia de las Rosáceas, el rosal Apricot Drift 'Meimirrote' es un híbrido moderno seleccionado por su crecimiento moderado y su floración duradera. Forma un arbusto bajo y tapizante, alcanzando 40 a 50 cm de altura y 40 a 50 cm de anchura, lo que le permite cubrir rápidamente el suelo. Sus tallos cortos y ramificados se desarrollan rápidamente y producen numerosos brotes floríferos que garantizan un efecto denso y compacto. Las flores, muy dobles y turbinadas, miden unos 5 cm de diámetro y están formadas por unos 50 a 55 pétalos dispuestos en corola abierta y ligeramente despeinada. Muestran un color albaricoque melocotón al abrirse, evolucionando luego hacia tonos más rosados y salmón, en un degradado sutil. Esta floración comienza en primavera y se renueva en oleadas sucesivas hasta las primeras heladas, asegurando un jardín florido continuamente. El follaje caduco, compuesto por hojas pequeñas verde oscuro brillante, es denso y cubre bien las ramas, manteniendo un aspecto cuidado incluso después de la floración. Gracias a su alta resistencia a enfermedades, especialmente al oídio y la Marsonia, este rosal se mantiene vigoroso sin necesidad de tratamientos químicos específicos. Su rusticidad hasta -18°C le permite adaptarse a regiones con inviernos moderados a fríos. A diferencia de algunos rosales tapizantes de porte más extendido, Apricot Drift mantiene una silueta homogénea y bien estructurada, limitando así las intervenciones de mantenimiento.

Poco exigente, el Rosal Apricot Drift se adapta a una amplia gama de suelos, siempre que estén bien drenados. Prefiere una exposición a pleno sol, pero puede tolerar una ligera media sombra en clima cálido. Su mantenimiento es mínimo. Con su color albaricoque cálido, combina a la perfección con plantas de tonos pastel o crema, como los rosales arbustivos rosa claro o los geranios vivaces (‘Brookside’, ‘Orion’). También se asocia muy bien con mentas de gato o lavandas, creando un contraste elegante entre el follaje gris-verde y las flores luminosas. En rocalla, puede plantarse junto a sedum, euforbias y milenramas, reforzando el efecto campestre y natural del conjunto. En bordes de caminos o setos, forma una cinta florida densa y armoniosa, estructurando el espacio con elegancia. En una terraza o balcón, en maceta o contenedor, ofrece un efecto florido abundante y colgante, ideal para animar un espacio reducido. Plantado en grupos de tres a cinco ejemplares, cubre eficazmente el suelo y asegura un espectáculo floral espectacular durante toda la temporada.