Helleborus niger (semillas) - Eléboro negro

El Helleborus niger es la especie botánica original de la Rosa de Navidad o Eléboro negro. Es una planta vivácea robusta, de gran longevidad y que prefiere un suelo exclusivamente calizo. Forma un macollamiento de grandes hojas flexibles de donde emergen en invierno durante varias semanas unas flores simples en forma de copa de color blanco, que adquieren tonalidades verdes a rosa púrpura al final de la floración. Para un crecimiento óptimo, instala el Helleborus niger a media sombra en un suelo bien mullido y fértil. Esta planta se expande lentamente, pero seguramente, ofreciendo cada año más flores y tolerando la competencia de las raíces.

Originaria de Europa occidental y central, desde Alemania hasta Eslovenia pasando por Austria, Suiza e Italia, el Helleborus niger es una planta vivácea de la familia de las Ranunculáceas que se hibrida muy fácilmente con otras especies como el Helleborus orientalis o el H.argutifolius, dando, al azar de las siembras, híbridos a la vez encantadores y fáciles de cultivar. El Eléboro negro es una planta muy resistente, de larga vida, altamente resistente al frío, que se adapta a la mayoría de los suelos y tolera bastante bien la sequía estival, aunque prefiere un poco de frescura. En la naturaleza, se encuentra en los bosques que cubren las laderas de los Alpes centrales y orientales, entre 300 y 1800m de altitud, exclusivamente en suelos calizos. La planta se desarrolla en un macollamiento de hojas basales, de 30 cm de altura y 50 cm de ancho. Está compuesta por hojas de color verde intenso, divididas en 5 a 7 folíolos lanceolados, dentados y bastante anchos. Las hojas viven alrededor de 8 meses y luego desaparecen, mientras que las nuevas ya han salido de la tierra. Entre diciembre y marzo aparecen tallos marrones que llevan de 1 a 3 flores simples de 4,5 a 8 cm de diámetro. Son flores en forma de copa, ligeramente inclinadas hacia abajo. Su color varía desde el blanco puro, con el revés rosado, hasta el rosa púrpura según su edad. El centro está ocupado por estambres amarillos. El Eléboro es una planta que no le gusta ser trasplantada una vez instalada, pudiendo tardar las plantas jóvenes hasta 2 años en florecer. Las semillas, formadas en abundancia, son sembradas en abril-mayo por las hormigas. Germinan fácilmente después del paso del frío, en el invierno siguiente.

Utiliza los eléboros para crear un escenario de jardín rico y colorido, combinándolos con plantas de sotobosque de tonalidades más vivas. El Eléboro negro tiene solo una exigencia: un suelo calizo, profundo, fértil, aunque sea arcilloso y bastante seco en verano. Plántalo en grupos, como un ramillete, cerca de la entrada de tu casa, en una ubicación sombreada para disfrutar plenamente de su floración luminosa y temprana. Ilumina perfectamente una zona sombreada, ya sea en el borde de un bosquecillo o sotobosque, junto a Euphorbia amygdaloides, Geranium macrorrhizum, Glechoma hederacea, anémonas de bosque, corydalis o bulbos de floración primaveral, enriqueciendo así el paisaje de tu jardín.