Rhododendron Easydendron INKARHO Rabatz

El Rododendro híbrido Easydendron INKARHO Rabatz es una variedad híbrida que abre sus yemas oscuras en flores delicadas con bordes rizados y ondulados, ampliamente expuestas a la vista, de un rojo intenso y puro, manchadas de negro-rojo en la parte superior de los pétalos. Forma parte de la gama Inkharo, que agrupa híbridos más tolerantes a la cal y a la arcilla en el suelo. Muy resistente y semi-precoz, forma un arbusto bastante extendido, más ancho que alto, con hojas persistentes de color verde oscuro. Esta selección fue incluida en la "shortlist" de la planta del año en 2011 en el Chelsea Flower Show. En un gran macizo, en un seto o al borde de los árboles, Rabatz puede prescindir de la tierra de brezo para ser plantado en suelos más variados, incluso ligeramente calcáreos o un poco pesados.

Los Rododendros son plantas de la familia de las ericáceas, al igual que los brezos. La historia de los Rododendros Inkharo, plantas un tanto revolucionarias, comienza en Alemania hace más de 20 años. Fue el descubrimiento de un rododendro que crecía de forma natural en una cantera de creta lo que permitió considerar el injerto de diferentes variedades en su sistema radicular fuera de lo común. Los arbustos obtenidos mediante este método toleran una amplia gama de suelos cuyo PH varía de 4.5 a 7.5, siempre que sean sueltos, fértiles, frescos y sin exceso de cal. En resumen, un suelo que sería adecuado para las hortensias. El cultivar Rabatz forma un gran arbusto ramificado de porte denso, alcanzando aproximadamente 1.40 m de altura a los 10 años para 1.80 m de envergadura, en buenas condiciones de cultivo, en terreno abierto. Su crecimiento es más bien lento. Sus grandes hojas son de forma elíptica, de color verde oscuro y brillantes por el haz, mientras que el revés es más claro y aterciopelado. Persisten en invierno. Hacia mediados de mayo, durante aproximadamente 3 semanas, florecen en los extremos de las ramas grandes ramilletes o corimbos esféricos que agrupan varias yemas florales. Se abren en grandes flores de 10 a 11 cm de diámetro, en forma de embudo, compuestas por pétalos rizados en el borde. El centro de la flor está moteado de rojo oscuro casi negro y cuenta con largos estambres claros. Los pétalos son de un rojo puro.

El Rododendro Rabatz es una planta muy resistente, hasta -22° C. Es relativamente tolerante en cuanto a la exposición, te recomendamos instalarlo al sol no ardiente o a media sombra, si es posible al este, donde se beneficia del sol matutino mientras está protegido del calor excesivo. En el jardín, gracias a su floración abundante y delicada, viste fácilmente un espacio sombreado, en compañía de Helechos, hostas azules o abigarrados, Andrómedas, Brezo arbustivos, Kalmias, Azaleas y arces japoneses, u otros rododendros del mismo grupo para formar hermosos mosaicos de texturas y colores. Más versátil, también puedes plantarlo junto a muchos otros arbustos florales, no necesariamente acidófilos: hortensias, lilos, membrilleros de Japón, buddleias, abelias o camelias de otoño. Las Anémonas del Japón también serán buenas compañeras, al igual que las velas de plata y las digitales, en el sotobosque.