Rhododendron yakushimanum Silberwolke

El Rhododendron 'Silberwolke' es un híbrido bastante reciente, especialmente florífero, derivado de la especie japonesa yakushimanum, que le ha legado un porte compacto. Su floración en los meses de mayo-junio es un deleite para la vista: ramilletes de yemas de color rosa púrpura se abren en flores onduladas de color rosa pálido, que se vuelven casi blancas con el paso de los días. El follaje perenne verde oscuro viste sus ramas, cuya arquitectura rechoncha evoca el arte japonés. Una variedad luminosa y romántica, galardonada en Inglaterra por la RHS en 2005, perfecta para vestir fácilmente un pequeño espacio sombreado del jardín.

Los Rhododendrons son plantas de la familia de las ericáceas, al igual que los brezos, prefiriendo en su inmensa mayoría suelos sin cal, con tendencia ácida, y climas húmedos. El Rhododendron yakushimanum 'Silberwolke' forma un arbusto denso, de porte redondeado de aproximadamente 1,20 m en todas direcciones en su madurez. Su crecimiento es bastante lento, generalmente alcanza 90 cm a los 10 años. Sus hojas perennes de un verde oscuro y mate son de forma elíptica y cubren bien la planta. Poseen un revés muy cubierto de pelusa, de color marrón rojizo. En mayo-junio, su floración notablemente abundante cubre el arbusto: agrupadas en corimbos, las yemas florales de color rosa púrpura se abren en grandes flores, con pétalos sedosos y ondulados en los bordes, de un rosa suave. Están adornadas con una muy ligera mancha amarillo-verdosa, como espolvoreadas con polvo de oro. Con el tiempo, las flores se aclaran hasta adquirir un tono blanco rosado muy suave.

Como todos los híbridos de yakushimanum, cariñosamente apodados "rhodos yak" por los especialistas, el Rhododendron 'Silberwolke' es muy resistente, hasta -15°C e incluso -20°C. Aunque prefieren una exposición de media sombra, estos híbridos toleran el sol siempre que no sea abrasador y que su base permanezca fresca. 'Silberwolke', por su floración abundante y luminosa, vestirá fácilmente un pequeño espacio sombreado del jardín, en compañía de helechos, de hostas azules o abigarrados, de Andrómeda, brezos, Kalmias, Azaleas y Arces Japoneses, u otros rododendros del mismo grupo para formar hermosos mosaicos de texturas y colores en primavera. El cultivo en maceta requiere riegos regulares, con agua no calcárea, y aportes de fertilizante específico para plantas de tierra de brezo.