Azalea mollis Viscosa

El Rhododendron o Azalea mollis Viscosa es un arbusto caducifolio de media sombra y tierra de brezo interesante por su resistencia al frío, su floración primaveral blanca, tan delicada como deliciosamente perfumada, y sus colores otoñales flamboyantes. Dotado de un porte bien erguido, se viste de hojas a menudo viscosas en el revés, que le han valido su nombre 'Viscosa'. Demasiado poco conocidas y utilizadas, las azaleas caducas son plantas de suelo no calcáreo infinitamente graciosas, dotadas de numerosas cualidades, que debes descubrir sin dudar en el jardín o en una maceta grande en la terraza.

El Rhododendron x knapHill 'Viscosa' desciende del Rhododendron molle, que es el progenitor de la mayoría de las azaleas caducas cultivadas en los jardines. Es un arbusto de la familia de las brezos, las ericáceas, originario del centro y este de China. Se trata de un arbusto de crecimiento bastante lento. Presenta un porte un poco desordenado en sus primeros años, luego sus ramas se densifican con el tiempo, dando a la planta un aspecto arbustivo y erguido. En madurez, esta azalea alcanzará aproximadamente 1.50 m de altura por 1 m de envergadura. A largo plazo, en condiciones de cultivo óptimas, el arbusto puede llegar a 2 m de altura por 1.20 m de envergadura. Su floración ocurre en abril-mayo, más o menos temprano según el clima, al mismo tiempo que aparecen las hojas jóvenes en las ramas. Las flores tienen forma de lirio y se agrupan en racimos terminales. Son de color blanco puro, adornadas con 5 largos estambres rosados y arqueados. Al final del día, exhalan un aroma especiado. El follaje, caduco en invierno, está compuesto por hojas simples, oval-lanceoladas, de borde entero, dispuestas de forma alterna en las ramas. Su tamaño varía de 5 a 10 centímetros de longitud, y su tono verde oscuro en verano cambia a naranja y rojo vivo en octubre, antes de caer. Los rododendros desarrollan un sistema radicular superficial, al que nunca debe faltarle frescor, pero teme la humedad estancada que lo asfixia.

Las azaleas de China, caducas, tienen menos exigencias que las azaleas de Japón, persistentes: son muy resistentes y toleran mejor las exposiciones soleadas, incluso un suelo puntualmente seco según los híbridos. No obstante, es en clima fresco, con inviernos marcados, plantadas en un suelo húmico y fértil, libre de caliza activa, donde darán lo mejor de sí. Son arbustos muy hermosos para macizos, con un porte muy natural, muy atractivos dos veces al año. Acompañan con alegría los arces de Japón que, al igual que ellas, cambian de vestimenta según las estaciones, así como los camelios de Japón o sus graciosos primos de floración otoñal a menudo perfumada, los híbridos de C.sasanqua. También puedes cultivarlas en una maceta grande elegida con cuidado, en un sustrato adecuado, y con riegos de agua no calcárea preferiblemente. La indiscutible belleza de las azaleas caducas merece algunos ajustes, para recrear las condiciones que les gustan.