Hortensia macrophylla Merveille Sanguine - Hydrangea

Debes trabajar el suelo en profundidad, unos 40 cm x 40 cm. Un buen abono de fondo (cuerno o sangre deshidratada) favorecerá el arraigo de tu planta y la nutrirá sin riesgo de quemaduras. Las Hortensias requieren una ubicación al sol o semisombra, dependiendo de la humedad de tu suelo, y una tierra neutra a ácida. Si tu suelo tiende a ser seco, mezcla nuestro retenedor de agua, el Stocksorb, con la tierra al rellenar el hoyo de plantación y prepara un cuenco de riego en la superficie. A finales del verano, te recomendamos no cortar las umbelas secas, ya que protegerán los brotes terminales de las ramas durante el invierno. Cortarás todas las flores secas a finales de febrero o con los primeros días soleados. El cultivo en maceta también es muy fácil si utilizas macetas suficientemente profundas (40 a 50 cm de profundidad), riegas adecuadamente y aportas abono regularmente a tus plantas. Cultivo en maceta: Utiliza una buena mezcla a base de tierra de brezo, a la que añadirás materia orgánica como cuerno tostado o sangre deshidratada y un poco de tierra de jardín, que hará tu sustrato menos ligero. Coloca tus plantas: dos o tres pies en una maceta de 50 cm ya lucen muy bonitos el primer año. Las variedades blancas, rojas y rosas mantienen mejor su coloración, ya que el agua de riego suele ser calcárea. Las azules requieren riegos con agua de lluvia y el uso regular de un azulador para hortensias a base de alumbre. También se recomienda encarecidamente el uso de un abono específico para hortensias.