Convolvulus sabatius Compacta

El Convolvulus sabatius Compacta es un subarbusto cubresuelos con largas ramas postradas, cubiertas de hojas pequeñas verdes persistentes en climas templados, que lleva durante todo el verano y hasta el otoño flores azul lavanda en forma de copa. Vestirá con originalidad las rocallas, la parte superior de los muretes y los terrenos pedregosos. Originario del entorno mediterráneo, es una especie de pleno sol algo sensible al frío que deberás reservar para climas templados, especialmente a orillas del mar ya que no teme a la brisa marina, o en macetas y suspensiones anuales.

La Campanilla azul (Convolvulus mauritanicus es un sinónimo de C. sabatius) es una planta de la familia de las Convolvuláceas. Es un primo cercano de la Campanita morada, que frecuentemente invade nuestros jardines, y que al igual que ella lleva flores en forma de copa. Pero no te preocupes, la comparación termina ahí, ¡el C. sabatius no es voluble! Esta Campanilla es originaria de la costa marroquí, pero también parece estar presente en Italia, ya que fue la antigua ciudad romana de Vada Sabatia (hoy Vado Ligure, cerca de Génova) la que le dio su nombre. Esta hermosa especie se encuentra en costas más bien áridas, en suelos secos y pedregosos, a menudo calcáreos.
Forma un cojín bajo, que se extiende progresivamente gracias a sus largos tallos rastreros algo lignificados. Están cubiertos de hojas pequeñas ovaladas, persistentes en climas templados. Entre finales de junio y octubre, la Campanilla azul revela su mayor atractivo: produce entonces por cientos flores en forma de copa de un elegante y raro azul claro a azul lavanda, cuyo centro está delicadamente marcado de amarillo por los estambres. La mata no es invasiva, y se limita a arrastrarse sobre una rocalla o caer en cascada desde un murete.
Muy cercana a la especie original, esta variedad Compacta es de dimensiones más modestas: la planta alcanza una altura de solo 15 cm aproximadamente, para una extensión de 50 cm a 80 cm en condiciones muy favorables. Como ella, se adapta a la mayoría de suelos, de ligeramente ácido a calcáreo, siempre que estén bien drenados. El cultivo del Convolvulus sabatius Compacta es muy fácil y se resume esencialmente a plantarlo en un lugar adecuado: es decir, en pleno sol, en un suelo pedregoso perfectamente drenado. Una vez bien establecido, ¡no pedirá ni una sola gota de agua! Es mejor olvidarse de regarlo que hacerlo en exceso, algo que detesta.

Rocallas, bordillos de caminos, escaleras y coronaciones de muretes de piedra serán los lugares ideales para instalar este Convolvulus sabatius Compacta. Constituirá un cubresuelos de elección en nuestras costas más benignas como Bretaña y el Mediterráneo. Sin embargo, su rusticidad es rápidamente puesta a prueba, y será difícil conservarlo en exterior si las temperaturas bajan frecuentemente por debajo de -5 °C en tu zona, especialmente si el suelo no está suficientemente drenado en invierno. Incluso si no muere, ten en cuenta que la planta perderá sus partes aéreas si está expuesta a una helada demasiado intensa. Algunas fuentes mencionan una resistencia de -8 °C, pero esto solo es posible en un entorno seco y favorable. Bajo cielos menos propicios, la Campanilla azul sigue siendo una excelente planta para realizar suspensiones anuales. En clima fresco, también podrás tratarla como vivácea, en maceta que protegerás durante el invierno en un local fresco y suficientemente luminoso (veranda, garaje con ventana...).

En clima privilegiado, esta bonita planta formará magníficas asociaciones con otras plantas mediterráneas, más bien arbustivas o erguidas para evitar la competencia en cuanto a ocupación del suelo. Así, el Cassia floribunda con su floración exótica amarilla brillante de larga duración creará un magnífico contraste de colores con el azul de nuestra Campanilla. Las Jaras también serán buenas compañeras, igual de resistentes a la sequía que ella, así como el Carissa con sus flores blancas perfumadas, que también resiste a la brisa marina como nuestra pequeña Campanilla azul.