Tiarella cordifolia Appalachian Trail

El Tiarella cordifolia 'Appalachian Trail' es una introducción reciente con un follaje particularmente colorido y dotado de buena longevidad. Esta variedad sorprendente muestra venas y manchas de color rojo vino que se vuelven chocolate a lo largo de las estaciones, sobre una lámina foliar verde. Desde finales de mayo hasta agosto se elevan por encima de la vegetación espigas plumosas de flores blancas, en un bonito contraste de colores. Esta pequeña perenne rizomatosa llena de vigor, generalmente semiperenne, cubre rápidamente y eficazmente el suelo a la sombra fresca. Su carácter rastrero permite también colocarla en una suspensión, de la que rebosará con entusiasmo.

El Tiarella 'Appalachian Trail' pertenece a la familia de las Saxifragaceae. Es un primo de las Heucheras con las que se hibrida muy fácilmente. Es originario de los bosques de Norteamérica. Su tamaño adulto alcanzará 10 cm para el follaje, 25 a 30 cm en flor, con una extensión de 30 a 50 cm. Esta tiarella forma una mata extendida que se propaga lateralmente mediante tallos estoloníferos que enraízan en la periferia de la planta madre. Su follaje, semiperenne, es su primer atractivo. Sus hojas dentadas, en forma de corazón y redondeadas, se parecen a las de las heucheras. Miden 10 cm de longitud y están bellamente acanaladas y muestran manchas púrpura de color de heces de vino irradiando desde las venas. Este tono se oscurece con el tiempo, volviéndose marrón chocolate sobre fondo verde. En mayo aparecen las flores individuales, blancas, densamente distribuidas en 'escobilla' sobre tallos de unos 30 cm de altura. La floración, particularmente larga para la especie, persiste desde mediados de primavera hasta agosto. El contraste de color entre las inflorescencias blancas y el follaje verde manchado de chocolate es especialmente atractivo en verano.

En estado silvestre, el Tiarella cordifolia se encuentra generalmente en entornos boscosos o montañosos. El cultivar 'Appalachian Trail' encontrará naturalmente su lugar en sotobosques húmedos junto a helechos, Impatiens balfouri, sellos de Salomón, astilbes. También puede utilizarse como planta de ribera. Se desarrollará igualmente muy bien en macetas o jardineras a la sombra. Se instalará entonces en una mezcla de tierra con buen drenaje sin exceso de fertilizante, vigilando los riegos en verano y reduciéndolos en invierno. Las macetas necesitarán protección contra los vientos fríos del invierno.

Las yemas florales se forman durante el verano, pero no se desarrollarán y florecerán hasta después de haber estado expuestas a un mínimo de 10 semanas de temperaturas frías al año siguiente. El frío es por tanto necesario para la maduración de esta vivácea.