Heuchera Red Sea

El Coralito 'Red Sea' es una obtención muy reciente, dotada de un follaje realmente único. En sus hojas brillantes con bordes muy ondulados se suceden toda una gama de colores fantásticos, desde el rojo púrpura combinado con rosa fucsia hasta el rosa-rojo plateado y el rosa cobrizo quemado más suave al final de la temporada. Esta vivácea forma un denso cojín cuyo color cambia constantemente. La floración de verano, delicada, en forma de finas espigas cubiertas de capullos blanco crema, añade aún más encanto a esta variedad sensacional. Poco exigente y robusta, esta coralito es ideal para colocar en bordillos de caminos o macizos, o incluso en macetas floridas en la terraza o el balcón.  

El Coralito 'Red Sea' pertenece a la familia de las Saxifragáceas. Es un híbrido hortícola obtenido por Dirk Scheys en Francia. La planta alcanzará aproximadamente 35 cm de altura y 40 cm de ancho, formando una gran mata extendida. El follaje es el principal atractivo de esta planta: las hojas son brillantes por el haz, y sus ricos tonos, mezcla de rojo, rosa, cobre y bronce, evolucionan a lo largo de las estaciones y las temperaturas. En verano, el color dominante es el rosa oscuro cobrizo. El envés del follaje es un rosa fucsia más o menos púrpura. La floración, ligera y aérea, comienza en junio y se prolonga hasta agosto. Estas largas espigas de flores blanco-crema que juegan con el viento dan un aspecto difuso a esta floración romántica, es este movimiento difícil de captar en un lienzo lo que ha valido a los coralitos el apodo de desesperación del pintor, que comparten con algunos saxifragas. Esta planta tiene un sistema radicular poco profundo, lo que la hace sensible a los suelos secos.

Instalada en terreno abierto, en rocalla sombreada y fresca o incluso en hileras para marcar un camino, este coralito aportará dinamismo y un toque de color fantástico al jardín. Combínala con hostas, pequeñas gramíneas (Stipa, Carex) y helechos para un efecto salvaje. También será una buena compañera para los arbustos (pequeños arces japoneses, espireas del Japón, artemisas blancas arbustivas) y los rosales. Acompáñala con el azul de las flores de los geranios vivaces o los nepétas, el único tono que realmente le falta, ya que le será perfectamente complementario. Piensa en los coralitos para decorar tus macetas, tiestos y jardineras junto con pelargonios, por ejemplo. Buena flor para cortar, las campanillas gráciles de esta planta aportan mucha ligereza a los ramos.