Rosal Betty Boop

El Rosal Betty Boop es un arbusto compacto y de cultivo fácil que forma parte de los floribunda más generosos y fotogénicos, incluso en media sombra y en suelos bastante secos durante el verano. Su floración bicolor y brillante, con flores semi-dobles blancas ribeteadas de rojo, se extiende desde junio hasta finales de temporada, incluso cuando no se eliminan las flores marchitas. Una floración con aroma afrutado que resalta un follaje verde oscuro brillante, rara vez afectado por enfermedades. Ideal para crear bordillos y macizos soleados, pequeños espacios o la terraza.

El Rosal Betty Boop es una creación estadounidense de Tom Carruth, que data de 1999. Ha obtenido el premio más alto otorgado a los rosales en los EE. UU.: el AARS.

Esta variedad, perteneciente a la familia de los rosales floribunda, forma en poco tiempo un arbusto robusto, de porte redondeado, ramificado y compacto, con tallos espinosos, de 80 cm de altura y una envergadura de 70-80 cm en promedio. Está cubierto de un follaje brillante, que nace rojo y se vuelve verde oscuro en verano. Su floración es abundante en mayo-junio, y luego vuelve a florecer regularmente hasta octubre si la planta no carece de agua. Sus corolas, de 5-6 cm de ancho, son semi-dobles, compuestas de 6 a 12 pétalos, y se agrupan en ramilletes de 5 a 7 flores. Los capullos rosa-rojo fucsia bien cerrados se abren en flores globulares amarillas y rojas. Con el paso de las horas, la corola se despliega en forma de copa bien abierta, mostrando pétalos ondulados. El color del centro de la flor evoluciona del amarillo al blanco marfil, mientras que el borde rojo bermellón se torna rojo magenta. El aroma de este rosal es bastante pronunciado, afrutado y muy agradable.

Los rosales floribunda permiten crear hermosos setos bajos, plantados en mezcla al borde de la terraza o en macizos de arbustos de pequeño tamaño. Combínalos con abelias, nandinas o cariopteris, por ejemplo. Son buenos compañeros para los flox paniculada y las grandes gipsófilas. El vigor y la resistencia de 'Betty Boop' la convierten en una variedad interesante para todos los jardines, incluso los más pequeños, y para el cultivo en macetas grandes. Su uso es múltiple, según los deseos de cada jardinero: en un macizo de rosas, acompañado de variedades blancas (Marie Pavie, Swanny) o rojas (Red Cascade, Lili Marlène), o incluso mezclado con viváceas de cultivo fácil como los geranios vivaces, los claveles de flores pequeñas, las campanillas o los ásteres. ¡Y sus rosas son tan cálidas en los ramos!