Dalia cactus Saint Saens

El Dahlia semi cactus Saint-Saens es una variedad de dalia elegante que atrae la mirada con sus grandes flores amarillas despeinadas estriadas de rojo, compuestas por pétalos tubulados y puntiagudos. Se producen en abundancia desde el verano hasta las heladas, en una planta arbustiva de hermosa estatura. Esta variedad aportará un toque de color suave y cálido a los macizos soleados, y sus largos tallos son perfectos para flores cortadas. ¡Muy bonita delante de follajes púrpuras o grises!

Las Dahlias pertenecen a la familia de las asteráceas y son originarias de las altiplanicies mexicanas. Actualmente, las decenas de miles de variedades hortícolas obtenidas por el hombre han invadido, para nuestro mayor placer, los jardines de todo el mundo. Son viváceas poco resistentes, con tubérculos carnosos, que se plantan en primavera. La variedad 'Saint-Saens' fue obtenida en 1970 en los Países Bajos. La planta forma una gran mata que puede alcanzar 1.20 m de altura y 60 a 70 cm de ancho. Está clasificada entre las Dahlias cactus, o más precisamente las semi-cactus; se trata de una categoría hortícola definida por la forma de la flor. En este grupo, las lígulas coloreadas del capitulum se enrollan incompletamente en al menos 1/3 de su longitud. La floración de esta variedad comienza en julio y termina en octubre-noviembre. Los capitula miden 12 a 15 cm de diámetro, las lígulas de un suave color amarillo están más o menos estriadas de rojo bermellón. El porte es arbustivo y erecto, y los tallos muy ramificados son huecos: necesitarán un tutor para árboles. Sus hojas son opuestas, pinnatisectas, es decir, se subdividen en 3 o 5 lóbulos dentados. Las hojas son de un verde medio y los tallos verde oscuro, más o menos sombreados de púrpura.

Para extender el período de floración y favorecer las floraciones posteriores, asegúrate de retirar las flores marchitas. Mejor aún, córtalas regularmente para componer seductores ramos coloridos combinando varias variedades.

'Saint-Saens' es el centro de atención en el jardín y su personalidad merece ser destacada, aislándola de otras floraciones multicolores. Se asociará preferentemente con plantas de follaje, como el hinojo, los physocarpus, las artemisas blancas arbustivas, los Kochias (Bassia scoparia), o gramíneas como las stipas o la cebada crinita. También combina con flores ligeras, en una armonía de colores; las salvias escarlata, los coreopsis amarillos o anaranjados, así como los cosmos, serán buenos compañeros sin eclipsar su floración. En macizos, combinará perfectamente con equináceas y helenios. Con grandes sedums, también formará una mezcla original y bonita.

Planta estrella de los bordillos y los pequeños jardínes amurallados, las Dahlias acompañan sin complejos a las flores más hermosas, pero también son apreciadas junto a plantas hortícolas. En México, esta tuberculada se cultivó inicialmente como verdura de raíz para consumo. Pero sus pobres cualidades gustativas la relegaron al rango de planta ornamental. Desde entonces, el interés por su hermosa exuberancia no ha disminuido.