Iris reticulata Pixie - Lirio

El Iris reticulata 'Pixie' es un cultivar de Lirio galardonado con el Award of Garden Merit por la Royal Horticultural Society por sus cualidades estéticas y su fiabilidad. Ofrece flores de un hermoso color azul-violeta, a la vez vivo e intenso, cuyos labios están manchados de blanco y amarillo dorado. Su follaje gris-verde suele alcanzar la misma altura que la flor, pero se alarga después de la floración hasta los 40 cm. Las flores, delicadamente perfumadas, aparecen en febrero-marzo, y la planta, resistente y robusta, aprecia los suelos muy drenados y el sol.

El Iris reticulata es una planta vivácea de la familia de las Iridáceas, originaria de las montañas del Cáucaso, Turquía, Irán e Irak. Este lirio es muy resistente (hasta -34°C) y fácil de cultivar en suelos muy drenados. 'Pixie' es un híbrido resultante de una siembra de la variedad 'Harmony'. La planta se desarrolla a partir de un órgano de reserva, que es un bulbo alargado de 2 a 3 cm de altura, cubierto por una epidermis blanca. Florece a finales de febrero o en marzo, según el clima, antes de la aparición del follaje, lo que lo hace valioso en el jardín. Las flores, de 7 cm de ancho, están sostenidas por tallos de unos 12 cm de altura. Son grandes en comparación con el tamaño de la planta y parecen emerger directamente de la tierra. Están formadas por 3 tépalos internos erguidos que dominan 3 tépalos externos más horizontales. Son ligeramente perfumadas. El follaje se desarrolla cuando las flores se marchitan, formando una mata de hojas estrechas, rígidas y puntiagudas, de hasta 20 cm de altura. Es en este momento cuando el bulbo se divide en varios bulbillos, permitiendo que la planta colonice su entorno.

El Iris reticulata 'Pixie' se adapta perfectamente al cultivo en macetas, en macizos soleados o en rocalla. Esta planta tiene como principales requisitos un suelo bien drenado y una exposición al sol. Se combina a la perfección con otros pequeños bulbos de primavera como las campanillas de invierno, los chionodoxas, los crocus o los tulipanes botánicos y tempranos. También queda muy bonito delante de helleboros de Stern, que aprecian el sol. Se recomienda plantarlo en grupos de 15 bulbos junto con Pulsatilla patens, por ejemplo. Esta planta también se adapta bien al cultivo en jardineras alpinas, donde puede convivir con especies como el Dodecatheon, el Globularia cordifolia o la Saxífraga 'Pixie'.