Catalpa bignonioides

El Catalpa bignonioides, o Catalpa común, es un árbol de tamaño mediano, con un porte muy extendido, redondeado y denso, bajo el cual es agradable refugiarse del sol en verano. Está dotado de grandes hojas verde claro de aspecto un poco tropical, que sirven de marco a su hermosa floración blanca en verano, y sus sorprendentes vainas de frutos con apariencia de habichuela. Este árbol caducifolio sin exigencias es perfecto para dar sombra a una terraza o una zona de juegos, preservando la luz solar desde octubre hasta principios de mayo.

El Catalpa bignoniodes, también llamado Catalpa o Catalpa común, es un hermoso árbol de la familia de las Bignoniáceas: es primo de hermosas trepadoras como los Campsis, Bignonia, Podranea y otros Tecomaria. Originario del sureste de EE.UU., fue introducido en Europa en 1726. Se trata de una especie de luz que aprecia los suelos más bien frescos, acepta el calizo y resiste muy bien a la contaminación urbana. Muestra un crecimiento rápido, una vegetación densa y ramificada y unas hojas notablemente grandes. A los 10 años, este árbol medirá entre 8 y 15 m de altura y desarrollará una corona ancha de 10 a 15 m. Su corteza de color gris pardo, ligeramente estriada, se exfolia con el tiempo en pequeñas placas. Sus ramas son frágiles, por lo que es necesario protegerlo de los vientos fuertes. Su follaje es caduco, aparece tardíamente en primavera y cae rápidamente en otoño. Sus hojas tienen forma de corazón alargado, son de un verde medio en primavera y verano, y se vuelven amarillas en otoño. En julio, produce hermosos racimos de flores blancas, muy apreciadas por los insectos libadores. Les siguen largas vainas, de 20 a 50 cm de longitud, verdes y luego marrones al madurar. Su sistema radicular poco profundo no tolera la sequía y lo hace sensible a los vientos fuertes. Este Catalpa ganará en densidad si se poda severamente cada 2 o 3 años. 

El Catalpa común es adecuado tanto para jardines medianos como grandes, pero no se recomienda en lugares muy expuestos al viento. Adaptado a entornos urbanos, puede integrarse muy bien en un jardín de ciudad, aislado como árbol de sombra. Su sistema radicular bastante superficial absorbe agua en verano; por lo tanto, es preferible elegir plantas poco exigentes en agua o plantar fuera del perímetro delimitado por su corona. Los amantes de las sombrillas vegetales también pueden plantar, o como alternativa, el Robinia pseudoacacia'Umbraculifera', más adaptado a tierras secas.