Veronica petraea Madame Mercier

La Veronica petraeae Madame Mercier es una pequeña vivácea muy resistente de porte tapizante, que cubre desde primavera hasta verano sus mantos de follaje verde vivo con racimos de pequeñas flores luminosas, azul veteadas de violeta, que el sol tiñe de púrpura. Esta montañera adaptable se sentirá a gusto en cualquier suelo drenado, fresco pero no demasiado seco, al sol o en semisombra.

La Veronica petraea es una planta rizomatosa de la familia de las plantagináceas originaria de las montañas del Cáucaso, más concretamente de Rusia, Azerbaiyán y Daguestán.

El cultivar 'Madame Mercier' es una mejora de la especie, con una floración especialmente luminosa. Esta vivácea herbácea crece formando un tapiz semiperenne, de 10 cm de altura, extendiéndose entre 40 y 50 cm de diámetro. Su floración es particularmente larga, abarcando de mayo a julio, cubriendo la planta de racimos de capullos púrpuras que se abren en pequeñas flores de cuatro pétalos redondeados, azul claro veteados de violeta. Los tallos rojizos y postrados están cubiertos de hojas de 1 a 3 cm de largo, semiperennes, de un verde medio brillante, ovaladas con bordes dentados, que adquieren una coloración púrpura cuando les da el sol.

La verónica Madame Mercier es perfecta para rocallas alpinas, pero también queda muy bonita en bordillos de pequeños macizos o para suavizar el borde de los caminos. También es adecuada para cultivo en macetas, contenedores y jardineras, desde donde caerá con gracia. Combínala, por ejemplo, con corydales, aster de los Alpes, azorella trifurcata o soleirolia para cubrir la base de lirios azules o del Hellobore foetidus. También puedes mezclar esta pequeña verónica con los bulbos más bonitos, incluidos los crocos, que se entrelazarán en su follaje con mucha elegancia.