Hiedra Woerner

La Hedera helix 'Woerner' es una variedad de Hiedra común de gran desarrollo, capaz de cubrir grandes superficies en el suelo y elevarse alto en los árboles o sobre un muro gracias a sus raíces aéreas. Sus hojas de tamaño mediano son de un hermoso verde oscuro brillante con venas más claras. Muy resistente (al menos hasta -20 °C), crece preferentemente en suelo húmico fresco en situación sombreada. Decorativo todo el año, su follaje adquiere un tono bronce en invierno bajo el efecto del frío.

Las Hiedras pertenecen a la familia de las Araliáceas, son primos del Ginseng y los Fatsias. Esta familia cuenta con alrededor de cincuenta géneros y cientos de especies y resulta bastante polimórfica, albergando tanto árboles como lianas o arbustos e incluso algunas herbáceas. El género Hedera por su parte cuenta con una docena de especies, la más extendida en nuestras latitudes siendo nuestra Hiedra común o Hedera helix. Este gigante de nuestros bosques puede alcanzar decenas de metros de longitud y trepar hasta la copa de los árboles que lo rodean.

La Hedera helix 'Woerner' es por tanto un cultivar de nuestra Hiedra autóctona, menos invasivo, pero que demuestra igualmente un gran vigor ya que alcanza 7 a 10 m de altura por 5 a 8 m de extensión. Como la especie tipo, está provista de raíces aéreas, que son raíces adventicias transformadas capaces de sujetarse a numerosos soportes, como muros o troncos de árbol. Estas falsas raíces pueden volverse problemáticas para los revestimientos de mampostería, canalones u otros paramentos, ya que son capaces de infiltrarse en pequeños intersticios. Igualmente, debido a su considerable desarrollo, no deberás plantar esta Hiedra cerca de árboles jóvenes que podrían ser invadidos. En cambio, será perfecta como planta cubresuelos para un sotobosque donde la baja luminosidad limita las posibilidades de plantación de otros vegetales.
Su follaje perenne es de hecho muy decorativo, compuesto por hojas trilobadas verde oscuro, de superficie brillante, que viran al bronce más o menos violáceo en invierno. Las plantas adultas florecen hacia los 10 años emitiendo en septiembre-octubre pequeñas umbelas de flores verde-amarillo apreciadas por las abejas en esta época tardía de la temporada. Son seguidas por bayas negras, del tamaño de un guisante, que maduran en la primavera siguiente. ¡Atención, son tóxicas!
Sin temer al frío, esta variedad se adaptará a la mayoría de suelos, neutros o calcáreos, incluso ligeramente ácidos, preferiblemente húmicos y algo frescos (aunque tolera la sequía una vez bien enraizada). En cambio, deberás evitarle una situación demasiado soleada, se complace en media sombra o incluso a la sombra, allí donde pocas otras plantas logran vegetar correctamente.

La Hiedra 'Woerner' es claramente una variedad para grandes espacios, inútil esperar confinarla en un pequeño talud o un muro demasiado exiguo. Será perfecta en sotobosque bajo la sombra de grandes árboles que no sufrirán sus arrebatos vegetativos. En lindes, podrás plantar en su compañía el Ilex Golden King, un Acebo de hojas abigarradas de amarillo que aportará un toque luminoso a esta escena en tonos verdes. Aún más llamativo, el Aucuba japonica Golden king aportará su masa de hojas de predominio amarillo dorado que contrastará sobre el tapiz vegetal verde oscuro de nuestra Hiedra. Con el Mahonia Media Charity, son las largas panículas de flores las que iluminarán los días oscuros de invierno con su hermoso amarillo vivo. Y del lado de los caducos, apuesta por el Arraclán o Rhamnus frangula, una planta silvestre de nuestra flora española aunque bastante desconocida a pesar de sus bellos colores en otoño y sus frutos decorativos.