Narciso triandrus Thalia

El Narcissus triandrus ‘Thalia’ aporta gracia y elegancia a los jardines desde hace más de un siglo. Creada en 1916, esta variedad de pequeñas flores blancas ligeras y perfumadas tiene una simplicidad atemporal. Cada tallo lleva de 2 a 3 flores delicadas... pero no te dejes engañar por esta aparente fragilidad, ‘Thalia’ tiene una vigor y rusticidad ejemplares. Fácil de cultivar, se multiplicará naturalmente con los años, sin mantenimiento. Perfecto plantado en masa, adaptado al cultivo en macetas y en rocalla, también será magnífico en ramos primaverales.

El Narciso triandrus ‘Thalia', llamado cariñosamente Narciso lágrimas de Ángel, o Narciso de las Glénan, es una antigua obtención neerlandesa registrada antes de 1916. El Narcissus triandrus, muy extendido en España, Portugal y Francia, es endémico del Finisterre. Thalia era una musa de la mitología griega, su nombre significa "florecer, reverdecer" - y este narciso está a su imagen. Muy popular en su creación, ‘Thalia’ tiene un carpe de otro tiempo, su aire informal evoca con nostalgia el final de la Belle Époque. En una época donde los narcisos son cada vez más sofisticados, se aprecia su simplicidad espontánea, su generosidad natural.

‘Thalia’ forma una mata que alcanza unos 35 cm de altura en flor. Sus flores se agrupan de dos o tres en el extremo de cada tallo. Es una planta de floración más bien tardía, en abril-mayo, cuyas yemas florales verde-amarillas dan al abrirse bonitas flores estrelladas de un blanco lechoso, inclinadas hacia el suelo. Estas flores están deliciosamente perfumadas. La 'trompeta' tiene forma de copa ancha bordada de pequeñas ondulaciones, rodeada de finos pétalos ligeramente curvados. El follaje es caduco, cilíndrico y desaparece en verano. La floración es abundante, homogénea, y atrae a los insectos polinizadores. Esta variedad se multiplica fácilmente por producción de bulbillos, sin intervención del jardinero, formando con el tiempo grandes matas. El Narciso ‘Thalia’ pertenece a la división 5 de la gran familia de los narcisos, que cuenta con 12.

Poco exigente, el Narciso ‘Thalia’ crece en cualquier suelo perfectamente drenado y mullido, aunque los resultados son menos buenos en suelos demasiado húmedos en verano. Tiene una clara preferencia por los suelos ácidos, donde será más florífero. Hay tal variedad de narcisos que puedes disfrutarlos durante tres meses en primavera, sin aburrirte ni un instante. Tienen en común naturalizarse fácilmente, adorar el amarillo y el blanco, y emitir a menudo fragancias suaves. Razones de sobra para cultivarlos en grandes matas (al menos 20 bulbos) para un efecto multiplicado. Combínalo con el narciso 'Tricollet', en macizos de aspecto natural, con escilas y jacintos, acompáñalo de tulipanes dobles pero también de nomeolvides, pensamientos o hepáticas. También será sublime bajo arbustos de tierra de brezo como los rododendros, o bajo un árbol, disperso en un tapiz de hiedra abigarrada. Un grupo de Narcisos 'Thalia' en un jarrón da un efecto sensacional. En macetas, este narciso es perfecto.

Para los ramos: te aconsejamos no mezclar los narcisos con otras flores como los tulipanes, ya que los tallos de los Narcisos contienen una sustancia que marchita rápidamente otras flores. Puedes atenuar este efecto nocivo para otros géneros de flores sumergiendo las puntas de los tallos de narcisos en agua caliente durante 1 a 2 minutos.

Para más consejos, no dudes en consultar la ficha familia de los narcisos.