Punica granatum California Sunset - Granado

El Punica granatum Legrelliae o California Sunset es un granado de flores de origen incierto, apreciado no por sus frutos, que nunca se forman, sino por su magnífica floración doble. Sus grandes flores de aspecto arrugado están cargadas de pétalos abigarrados en tonos naranja, salmón y crema, y brotan en abundancia a finales de primavera o en verano según el clima. Este arbusto vigoroso no tiene espinas, y su follaje caduco, de un verde brillante, adquiere un hermoso tono amarillo dorado en otoño. Este arbusto de floración generosa es poco exigente en cuanto al tipo de suelo, prefiere tierras frescas en profundidad, pero resiste muy bien la sequía.

El granado de flores Legrelliae a veces se comercializa bajo los nombres de Madame Legrelle, Madame Legrellia o California Sunset. Es un cultivar antiguo, de orígenes oscuros, bautizado en honor a una tal señora Legrelle, coleccionista de plantas, mencionada en 1875 en una revista inglesa* dedicada a la jardinería, Su vínculo con los granados de flores sigue siendo un misterio. El Punica Legrelliae es un pequeño árbol o un gran arbusto de la familia Lythraceae, curiosamente emparentado con la salicaria (Lythrum salicaria), tan común cerca de nuestros cursos de agua. El granado de frutos, del que desciende, es originario de una vasta región que cubre el sureste de Europa y se extiende hacia el este hasta el Himalaya.

'Legrelliae' forma primero una mata de ramas no espinosas y enmarañadas en su juventud, mostrando un crecimiento bastante rápido hasta la madurez, que no aparece antes de los 5 años. La planta adulta se desarrolla a un ritmo mucho más lento, formando después de algunos años un pequeño árbol de 3m de altura por 2m de envergadura como mínimo, con un porte extendido y redondeado. De una mata, se convierte en un árbol asentado sobre un tronco de apariencia torturada, cuyo encanto recuerda al de los olivos en tallo. La floración ocurre en masa, en junio-julio, y luego más esporádicamente durante todo el verano. Las flores, grandes para la especie, miden 6cm de diámetro. Están compuestas por numerosos pétalos arrugados donde se mezclan el naranja, el rosa y el blanco-crema, emergiendo de un cáliz grueso de textura cerosa que ya evoca la futura granada. Pero en esta variedad, como en todos los granados de flores dobles, las flores son estériles y los frutos no se forman. El follaje, caduco, está compuesto por hojas pequeñas ovaladas, gruesas, brillantes, de color verde vivo. Nacen bronceadas a púrpura en primavera y se vuelven amarillas antes de caer en otoño.

Símbolo de abundancia como su ancestro emblemático de las civilizaciones antiguas, el granado Legrelliae es un magnífico ejemplar para plantar aislado en un lugar cálido. Resistente hasta -12/-15°C, crecerá sin problemas en cualquier lugar donde el olivo en tallo y la higuera logren mantenerse, e incluso hasta en Anjou o en la región parisina en lugares bien protegidos. También se puede utilizar en un seto, podándolo regularmente, asociado a un falso jazmín (Trachelospermum jasminoides), a los arrayanes e incluso, como en los jardines de la Alhambra, a grandes rosales arbustivos (Rosa complicata, Rosa glauca, Ghislaine de Feligonde, Roseraie de l'Haye...). En la terraza, lucirá espléndido en una maceta grande, acompañado de cítricos, Grevillea y adelfas. Este modo de cultivo permite guardar el árbol en un local muy luminoso y cálido en nuestras regiones muy frías.

La ciudad de Granada, cruce de civilizaciones árabes y andaluzas, situada en el sur de España, debe su nombre a la presencia del granado, traído por los moros y plantado en abundancia en los míticos jardines del palacio de la Alhambra. Este árbol también prosperaba en los jardines colgantes de Babilonia y los romanos lo descubrieron en Cartago, bautizándolo como Manzana de Cartago.

  *Journal of Horticulture, Cottage Gardener y Country Gentlemen, Volumen 28, 1875.